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Temas que se abordan en este libro: La vejez y la medicina familiar

Arnulfo Irigoyen Coria Lourdes Santoyo Villaseñor Martín Aceves Martínez El rol del médico familiar en el cuidado a los adultos mayores

Juan Pablo Salazar Reyes Arnulfo Irigoyen Coria El proceso de envejecimiento y la salud

Martín Eduardo Montaño Portillo Arnulfo Irigoyen Coria Los pacientes ancianos: población vulnerable

Arnulfo Irigoyen Coria Martin Isaac Aceves Martínez Yessica María de Jesús Sandoval Reynoso Paola Monserrat Romero Torres Verónica Morelos Romero El paciente anciano: desafío para la medicina familiar

Arnulfo Irigoyen Coria Jessica Morales Prado Yunuen Lucero Campos Moreira Pedro Edwin Olvera de la Rosa Lourdes Thalía Uribe Nava Aspectos sociomédicos del envejecimiento

Arnulfo E. Irigoyen Coria Anel Jiménez Siles, Berenice Antúnez Cruz

ENVEJECIMIENTO SALUDABLE (Los residentes de medicina familiar escriben sobre la vejez y la salud.)

Este libro es producto del trabajo de un grupo de residentes de segundo año de la especialidad en medicina familiar de la Universidad Nacional Autónoma de México. Los alumnos proceden de diversas Unidades de Medicina Familiar del Instituto Mexicano del Seguro Social en la Ciudad de México. Estos ensayos se generaron en el desarrollo del Seminario de Atención Médica II durante el año 2017.

ENVEJECIMIENTO SALUDABLE

(Los residentes de medicina familiar escriben sobre la vejez y la salud.)

MARTÍN ISAAC ACEVES MARTÍNEZ, YUNUEN LUCERO CAMPOS MOREIRA, MARTÍN EDUARDO MONTAÑO PORTILLO, JESSICA MORALES PRADO, VERÓNICA MORELOS ROMERO, PEDRO EDWIN OLVERA DE LA ROSA, PAOLA MONSERRAT ROMERO TORRES, JUAN PABLO SALAZAR REYES, YESSICA MARÍA DE JESÚS SANDOVAL REYNOSO, LOURDES SANTOYO VILLASEÑOR, LOURDES THALÍA URIBE NAVA

Archivos en Artículo Editorial Vol.19 (2) 31- 33 Medicina Familiar ______________________________________________________________ 2017

La atención a los ancianos: asignatura pendiente para la medicina familiar Care for the Elderly: Pending Subject for Family Medicine Arnulfo Irigoyen Coria,* Martin Isaac Aceves Martínez, ** Yessica María de Jesús Sandoval Reynoso,**Paola Monserrat Romero Torres, ** Verónica Morelos Romero ** * Médico Residente de segundo año de la especialidad en medicina familiar. Instituto Mexicano del Seguro Social.Ciudad de México. ** Profesor Asociado C, Subdivisión de Medicina Familiar, División de Estudios de Posgrado, Facultad de Medicina, Universidad Nacional Autónoma de México.

________________________________________________________________________________ … el envejecimiento saludable es algo más que la ausencia de enfermedad. Para la mayoría de las personas mayores, lo más importante es mantener la capacidad funcional. Los mayores costos para la sociedad no son los gastos que se hacen para promover esa capacidad funcional, sino los beneficios que podrían perderse si no realizamos las adaptaciones e inversiones apropiadas. El enfoque recomendado ante el envejecimiento de la población, que tiene en cuenta la sociedad e incluye el objetivo de construir un mundo favorable a las personas mayores, requiere transformar los sistemas de salud del modelo curativo a la prestación de cuidados integrales, centrados en las necesidades de las personas mayores. Margaret Chan 1

La familia: red social de apoyo La familia es una institución que cumple una importantísima función social como transmisora de valores éticos y culturales; por lo que juega un decisivo papel en el desarrollo psicosocial de sus integrantes En referencia al rol determinante de la familia para el desarrollo social y el bienestar de sus miembros, se plantea que: la familia es la que proporciona los aportes afectivos y sobretodo materiales necesarios para el desarrollo y bienestar de sus miembros. El grupo familiar desempeña un rol decisivo en la educación formal e informal, es en su espacio donde son absorbidos los valores éticos y humanísticos y donde se espera que los lazos de solidaridad se afiancen. 2 Es una verdad indiscutible que la familia como red de apoyo social, acrecienta su importancia con el envejecimiento de sus integrantes. En referencia al rol determinante de la familia para el desarrollo social y el bienestar de sus miembros, se plantea que: « la familia es la que proporciona los aportes afectivos y sobretodo materiales necesarios para el desarrollo y bienestar de sus miembros. Ella desempeña un rol decisivo en la educación formal e informal, es en su espacio donde son absorbidos los valores éticos y humanísticos y donde se profundizan los lazos de solidaridad.3 31

Irigoyen Coria A. y cols.

Archivos en Medicina Familiar

La familia, como red social de apoyo, acrecienta su importancia con el envejecimiento de sus integrantes de más edad, condicionados en esta etapa de la vida por la reducción de su actividad social, lo que incrementa para el anciano el valor del espacio familiar, que siempre será el insustituible apoyo; pese a que con el envejecimiento la problemática familiar se complejiza porque, entre otros factores, existe superposición de varias generaciones con diferentes necesidades, demandas y diferentes sistemas normativos. De allí la necesidad de encarar la problemática de la vejez desde el espacio familiar. Abordar la problemática del envejecimiento como un complejo proceso -tanto humano como médico social- obliga al médico especialista en medicina familiar a:   

conocer el rol del anciano dentro de la estructura y la dinámica de la familia identificar la naturaleza de las relaciones con y entre los hijos señalar con claridad las formas de la solidaridad intergeneracional

estos tres elementos son fundamentales para el análisis de la calidad de vida en el escenario médico familiar. El médico familiar y los cuidadores de los ancianos El papel del médico familiar ante el proceso de envejecimiento -es de elevada importancia- puesto que le permite una intervención oportuna y adecuada con un enfoque humano e integral. Esto es que en todo momento haga el esfuerzo por ayudar a los familiares de su paciente -a dilucidar el proceso de envejecimiento con las consecuencias que este conlleva-.4 Debería establecerse no solamente en la normatividad -sino en el actuar cotidiano- que el equipo de salud tiene un rol fundamental, constituido por dos pilares: por un lado ofrecer conocimientos y competencias que mejoren la calidad del cuidado y por otro, facilitar un soporte emocional y empático para los cuidadores. El problema más serio se presenta cuando el anciano sufre de algún tipo de demencia o incluso de Alzheimer. González Rodríguez 4 ha descrito con minuciosidad el panorama de los cuidadores ante el paciente con Alzheimer, en la población de Salamanca, España:     

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El 70%-80% de los pacientes afectados de demencia se encuentran en su domicilio. En el 68%-80% de los casos, el paciente recibe los cuidados de una sola persona (cuidador principal). El perfil de este cuidador es el de una mujer, de unos 50-60 años, cuyo parentesco es de hija/o (45%-60%), esposo/a (9%-31%), hermanos, y otros el resto, de los que sólo el 17%20% trabajan fuera de casa. El 60% dedican 20 horas al día a los cuidados del enfermo, ya que son responsables de él tanto de día como de noche. Entre el 11% y el 23% de las familias reciben ayuda externa de un cuidador profesional.

Volumen 19 (2) abril-junio 2017

Atención a los ancianos: asignatura pendiente

Algunas actuaciones pueden facilitar las funciones de un cuidador de un enfermo de Alzheimer:       

implantar rutinas para generar automatismos que faciliten las actividades habituales buscar apoyo y ayuda familiar, social e institucional prevenir accidentes domésticos y la incorporación de otras morbilidades establecer pautas de cuidados higiénicos potenciar la autonomía del enfermo y el autocuidado del cuidador procurar hablar al enfermo de forma sencilla y tranquila actuar con “inteligencia” ante sus negativas y manías

en definitiva, ayudar, sin crear dependencia de forma temprana. 4-6 Los médicos familiares debemos identificar a las familias en donde el abandono de los ancianos represente un alto riesgo. Para este propósito, resulta imprescindible valorar factores asociados como:         

personalidad del anciano longevidad evolución de las enfermedades crónico-degenerativas disfunciones familiares estrés del cuidador problemas económicos falta de apoyo familiar deterioro funcional abuso de drogas o alcohol y la historia previa de violencia en la familia.

Referencias 1. 2. 3.

4. 5. 6.

Chan M. Prólogo. Biblioteca de la OMS: Informe mundial sobre el envejecimiento y la salud. 2015. Disponible en: http://apps.who.int/iris/bitstream/10665/186466/1/9789240694873_spa.pdf?ua=1&ua=1 Ortega Ruiz P, Mínguez Vallejos R. Familia y transmisión de valores. Teor Educ. 2003; 15: 33-56. Disponible en: https://gredos.usal.es/jspui/bitstream/10366/71937/1/Familia_y_transmision_de_valores.pdf Cervera Estrada L, Hernández Riera R, Pereira Jiménez I, Sardiñas Montes de Oca O. Caracterización de la atención familiar al adulto mayor. AMC [Internet]. 2008 Dic; 12( 6 ):3-11. Disponible en: http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1025-02552008000600006&lng=es. Irigoyen Coria A, Morales López H. El anciano y su familia. En: Hamui Sutton A, Martínez Gallardo L. (eds.) The Family Physician and the Care of the Elderly. Pan Am Fam Clin 2006;1:10-15. González Rodríguez VM, et al. La enfermedad de Alzheimer. SEMERGEN 2004;30(1):18-33. González VM, Martín C, editores. Demencias en Atención Primaria. Diagnóstico temprano y seguimiento. Salamanca, 2002. Citado en: González Rodríguez VM, et al. La enfermedad de Alzheimer. SEMERGEN 2004;30(1):18-33.

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Archivos en Artículo Especial Vol.19 (4) 143-147 Medicina Familiar _________________________________________________________________________________ 2017

Cinco reflexiones sobre la enseñanza de la atención a las familias en las residencias de medicina familiar Five Reflections on the Teaching of Family Care in Family Medicine Residences Arnulfo E. Irigoyen Coria,* Miguel Ángel Muñoz Arroyo,** Verónica Morelos Romero,** Anel Jiménez Siles,*** Rafael Martín López Montiel, ** Jessica Estefanía Suárez Esquivel, ** Verónica Calva Valladares, *** Berenice Antúnez Cruz, *** Erika Sinaí Esquivel García, *** Isabel Sandra Miramón Bonilla.*** ** Profesor Asociado C, Subdivisión de Medicina Familiar, División de Estudios de Posgrado, Facultad de Medicina, Universidad Nacional Autónoma de México. ** Médico Residente de segundo año de la especialidad en medicina familiar. Unidad de Medicina Familiar No. 20 de la Ciudad de México. Instituto Mexicano del Seguro Social. ***Médico Residente de segundo año de la especialidad en medicina familiar. Unidad de Medicina Familiar No. 21 de la Ciudad de México. Instituto Mexicano del Seguro Social.

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Introducción En este trabajo se presentan cinco reflexiones en los que se tomaron como punto de referencia dos artículos de Revilla de la L. y cols. 1,2 -aun cuando distan aproximadamente 10 años de haber sido publicados entre ellos- su vigencia es incuestionable. En particular porque aportan información para el debate sobre la enseñanza de la “atención a las familias” en el marco de los cursos de especialización en medicina familiar. Este artículo ha sido el producto colaborativo de un profesor con nueve alumnos, en el desarrollo del Seminario de atención médica II del curso de especialización en medicina familiar según el PUEM, en las aulas de posgrado de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México. Al tomar como un punto de referencia las premisas de Piaget y Vigostky 3 este proyecto se inició con un propósito muy preciso -el papel más importante que asume un profesor- es proveer un ambiente en el cual el estudiante pueda experimentar el proceso de investigación de una manera espontánea. Estamos de acuerdo en que el aprendizaje debería ser observado y valorado como un proceso social y por otra parte que dicho proceso suceda entre grupos colaborativos con la interacción productiva de los integrantes de estos grupos. De esta manera se pueden materializar al menos tres postulados de Vigostzky: a) El aprendizaje y el desarrollo son una actividad social y colaborativa que no puede ser enseñada a nadie. Depende del estudiante “construir su propia comprensión” en su propia mente. b) La Zona de Desarrollo Próximo puede ser usada para diseñar situaciones apropiadas durante las cuales -el estudiante debería recibir el apoyo necesario e indispensablepara un aprendizaje óptimo. c) Cuando son ofrecidas las situaciones apropiadas, se debe tomar en consideración que el aprendizaje debería tomar lugar en “contextos significativos”; preferiblemente donde el conocimiento va a ser aplicado. Así, que mejor lugar que el escenario en donde se imparte el Seminario de atención médica II del curso de especialización en medicina familiar según el PUEM. 3

Primera reflexión: Revilla de la L. y cols.1 Mencionan que la mayoría de las organizaciones de la nueva especialidad de medicina familiar que se han incorporado a la Organización Mundial de Médicos Familiares (por sus siglas en inglés ----

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Irigoyen Coria A. y cols.

Archivos en Medicina Familiar

WONCA), tienen establecidos programas de residencia de formación posgraduada de dos o tres años para preparar a los licenciados en medicina a ser médicos de familia competentes. El programa académico del Departamento de Medicina General de la Escuela Médica postgraduada de la Universidad de Exeter (Reino Unido) divide su curriculum en cinco áreas: Salud y enfermedad, desarrollo humano, conducta humana, medicina y sociedad y organización de la práctica general. En la actualidad la Escuela de Medicina de la Universidad de Exeter reconoce que la cobertura de la atención primaria se ubica en el 90% del contacto del paciente en el sistema de salud del Reino Unido tiene lugar en la atención primaria; fundamentado en un equipo de atención primaria extenso y multidisciplinario. 4 Figura 1. Áreas Curriculares de la Universidad de Exeter

Segunda reflexión: El RAP (Residency Assistance Program) establecido los Estados Unidos de América (EEUU) desde 1975 ha impactado en al menos 250 programas de residencia en medicina familiar. La sección de dicho documento que se ocupa de los contenidos curriculares de la especialidad está constituida por los capítulos de la medicina familiar, el comportamiento humano, psiquiatría, medicina comunitaria y los correspondientes a las áreas de conocimientos en medicina, cirugía, pediatría, obstetricia-ginecología y otras especialidades. Revilla de la L. y cols. apuntan que en el capítulo correspondiente a la medicina familiar se incluye un apartado en relación a la atención familiar; encontrando otra referencia sobre dinámica familiar en el capítulo sobre el comportamiento humano.1,5,6

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Volumen19 (4) octubre-diciembre 2017

Enseñanza de la atención a las familias

Figura 2. Contenidos curriculares en programas de medicina familiar en EEUU.

Tercera reflexión: Al diseñar un programa sobre la enseñanza de la atención a la familia, conviene estudiar, aunque sea de forma sucinta, las bases sobre las que se apoya el modelo docente que se propone. Parece conveniente hacer algunos comentarios acerca de las bases sobre los que se sustenta este programa, esto es: entender a la familia como una unidad de atención, contar con un modelo explicativo de la atención familiar, diferenciar el trabajo con familias, de la terapia familiar y conocer cuáles son las actividades que debe de realizar el médico en la atención familiar.1,7 (Figura 3). Figura 3. Bases para establecer un programa docente de atención familiar.

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Irigoyen Coria A. y cols.

Archivos en Medicina Familiar

Cuarta reflexión Para de la Revilla el analizar a la familia como unidad de atención se comprende solo si se entiende como un subsistema social abierto que se encuentra en constante interacción con el medio, en la que los miembros de la familia asumen su pertenencia y en la que comparten sus recursos. Resulta conveniente reconocer a la familia como un todo -como una unidad integral- en la que estaríamos obligados a soslayar la atención individual por una atención más integral que tome en cuenta las demandas de una familia. Un ejemplo, sobre los elementos que el médico familiar debería tomar en cuenta en este enfoque integral -serían los derechos de niñas, niños y adolescentes- de manera enunciativa y no limitativa, los cuales incluyen: derecho a la vida, a la supervivencia y al desarrollo; derecho de prioridad; derecho a la identidad; y de manera particular el derecho a vivir en familia. 5 (Figura 4) Figura 4. La familia como unidad de atención.

Quinta reflexión No obstante que existen técnicas de terapia familiar comunes entre un terapeuta familiar y un médico de familias, es importante diferenciar el abordaje, ya que se podrían presentar alteraciones al aplicar estas “normativas” dentro de la consulta.1 Recuérdese el concepto de Gallo: El Médico Familiar no es un Terapeuta Familiar; según Gallo, el Médico Familiar es un clínico que entiende y asume la importancia trascendental de la familia sobre cómo y de qué enferman sus miembros, teniendo en cuenta su lado positivo, como recurso de la salud, y su lado negativo, como generadora de enfermedad y de conductas de salud erróneas. Por otra parte, reconoce que está en una posición privilegiada para detectar problemas familiares y valorará la intervención en función del problema encontrado y de su propia capacidad en esta área. 3,4 (Tabla 1) 146

Volumen19 (4) octubre-diciembre 2017

Enseñanza de la atención a las familias

Tabla 1. Diferencias entre el trabajo con familias y la terapia familiar.

Fuente: Revilla L de la, et al. Un nuevo enfoque de la enseñanza de la atención familiar en el programa de la especialidad de medicina familiar y comunitaria. Medicina de Familia (And) 2001; 2(1):64-74.

Agradecimiento Hacemos un reconocimiento por la valiosa colaboración de la Ing. Irma Jiménez Galván, técnica académica de la Subdivisión de Medicina Familiar de la División de Estudios de Posgrado de la Facultad de Medicina de la UNAM.

Referencias 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8.

Revilla L de la, et al. Un nuevo enfoque de la enseñanza de la atención familiar en el programa de la especialidad de medicina familiar y comunitaria. Medicina de Familia (And) 2001; 2(1):64-74. Bailón Muñoz E, de la Revilla Ahumada L. La atención familiar, la asignatura pendiente. Aten Primaria. 2011;43(2):5557. Castillo S. Propuesta pedagógica basada en el constructivismo para el uso óptimo de las TIC en la enseñanza y el aprendizaje de la Matemática. Rev Latin Invest en Matemática Educativa 2008; 11(2):171-194. University of Exeter. Medical School. Available:http://medicine.exeter.ac.uk/research/healthresearch/primarycare/ Pugno P, Kahn NB. The Residency Assistance Program: 1,000+ Opportunities and 30 Years of Experience Promoting Excellence in Family Medicine Education. Fam Med 2005;37(4):253-8.Available: https://www.stfm.org/fmhub/fm2005/April/Perry253.pdf. The Residency Assistance Program (RAP) for family practice. Criteria for excellence in a residency program, fifth edition. January 2003. www.aafp.org/x14265.xml. Derechos humanos de niñas, niños y adolescentes. México. Disponibe en: http://www.cndh.org.mx/Ninos_Derechos_Humanos Gallo-Vallejo F. Grupo de trabajo de SEMFYC. Perfil Profesional del médico de familia. Aten Primaria. 1995; 16 (1): 5-6. En: Irigoyen-Coria A, Ponce-Rosas ER, García-Manrique JG. Hacia una definición de la práctica del médico familiar. Reflexiones sobre el pensamiento de tres autores. MPA e-Journal Med. Fam. & At. Prim. Int. 2010, 4 (2): Disponible en: http://www.idefiperu.org/MPANRO4A/fullpuntvistn22010.html.

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Archivos en Artículo Editorial Vol.19 (1) 13- 19 Medicina Familiar _______________________________________________________________ 2017

El cuidado integral a los ancianos: el papel del médico familiar Comprehensive Care for the Elderly: the Role of the Family Physician Juan Pablo Salazar Reyes,* Arnulfo Irigoyen Coria.** * Médico Residente de segundo año de la especialidad en medicina familiar. Unidad de Medicina Familiar No. 20 de la Ciudad de México. Instituto Mexicano del Seguro Social. ** Profesor Asociado C, Subdivisión de Medicina Familiar, División de Estudios de Posgrado, Facultad de Medicina, Universidad Nacional Autónoma de México.

________________________________________________________________________________ Se necesita con urgencia una acción de salud pública integral sobre el envejecimiento. Aunque falta mucho por aprender, tenemos pruebas suficientes para actuar ahora, y hay algo que cada país puede hacer, independientemente de su situación actual o nivel de desarrollo. La respuesta de la sociedad al envejecimiento de la población requiere transformar los sistemas de salud para pasar de los modelos curativos centrados en las enfermedades a una atención integrada y centrada en la personas mayores. Habrá que desarrollar, incluso a partir de cero, sistemas integrales de cuidados a largo plazo. Y se necesitará una respuesta coordinada entre muchos otros sectores y distintos niveles de gobierno. Para ello hará falta un cambio fundamental de nuestra concepción del envejecimiento, a fin de tener en cuenta la diversidad de las poblaciones de edad y combatir las inequidades que a menudo subyacen al envejecimiento. Además, se deberán incorporar mejores formas de medir y monitorear la salud y el funcionamiento de las poblaciones de edad. Aunque estas medidas inevitablemente requerirán recursos, es probable que sean una buena inversión en el futuro de la sociedad: un futuro que ofrezca a las personas mayores la libertad de llevar una vida que las generaciones anteriores nunca hubieran imaginado. Informe mundial sobre el envejecimiento y la salud. 2015. 1

Introducción El manejo integral es un elemento esencial de la medicina familiar. No debería soslayarse que el manejo integral incluye de manera relevante el seguimiento y la continuidad en la atención a los pacientes de la tercera edad. Pero no sólo al paciente sino también a los integrantes de la familia -este debería ser un elemento que caracterice a los médicos familiares- debido a que estos pacientes tienden a ser más vulnerables, ya sea por alguna enfermedad crónica degenerativa o por alguna crisis de adaptación, bien sea por el ingreso a la etapa de retiro, la jubilación o por el fallecimiento de un familiar cercano. Uno de los objetivos esenciales de la medicina familiar es el mejorar e incrementar la calidad de vida de los pacientes y sus familias. Procurar que el paciente anciano se encuentre lo más integro que se pueda tanto física como emocionalmente. El estudio de la función mental es un capítulo estratégico que puede ser valorado por varios algunas pruebas como: el Minimental, Barthel, Katz, Filadelfia, Pfeifer, los cuales pueden ayudar al médico familiar para realizar la detección precoz de algún proceso de deterioro cognitivo y/o psicomotriz y su referencia oportuna a un servicio más especializado. 13

Salazar Reyes JP. y col.

Archivos en Medicina Familiar

La valoración social ayuda a entender el proceso de comunicación y de relaciones interpersonales y favorece la intervención en por ejemplo: la terapia ocupacional, a fin de aumentar la movilidad, estimular alguna vocación; y sobre todo hacer hincapié en la terapia recreativa ya que estimula el desarrollo psicomotriz y social.2 Compromisos profesionales del médico familiar con los ancianos:     

Cuidado del paciente. Capacitar al equipo de salud. Renovar modelos sencillos para la detección de enfermedades crónico-degenerativas, así como prevenir complicaciones agudas y tardías. Fortalecer factores protectores en el paciente y su familia. Disminuir y tratar de atenuar factores de riesgo que afecten al anciano y su entorno.

Elementos 2-5 que debería valorar el médico familiar antes de solicitar la ayuda de la familia para el manejo del paciente anciano: 

Informar a los familiares en qué consiste el padecimiento de su paciente.



Explicar los signos y síntomas de la o las enfermedades, además de precisar cuáles pueden ser datos de alarma para poder acudir a un servicio de urgencias antes de que ocurran complicaciones.



Explicar el tratamiento y las metas del “tratamiento integral”.



Plantear medidas que en conjunto puedan mejorar la relación médico-paciente-familia.



Identificar redes de apoyo, ya se algún familiar, vecino, el personal de salud, o integrar al paciente a un grupo de auto-ayuda.



Respetar la intimidad e integridad del paciente.



Ofrecer a los pacientes y a los miembros de la familia respuestas a sus dudas; dejando claro que la acciones son para beneficio del paciente, respetando la relación médico-pacientefamilia.



Mejorar la comunicación con los demás integrantes familiares, personal de salud y con la sociedad en sí. 2

En conclusión: el médico familiar debe hacer hincapié y explicar claramente -a los cuidadores- la importancia que tienen, tanto para el paciente como para la familia y aún para la sociedad. Mencionarles que tienen el derecho de pedir ayuda u orientación sobre alguna circunstancia. Tomar medidas preventivas y realizar estrategias para mejorar el ambiente familiar.2-5 14

Volumen 19 (1) enero-marzo 2017

Ancianos y el rol del médico familiar

Referencias 1.

Biblioteca de la OMS: Informe mundial sobre el envejecimiento y la salud. 2015:243. Disponible en: http://apps.who.int/iris/bitstream/10665/186466/1/9789240694873_spa.pdf?ua=1&ua=1

2.

Trigás-Ferrín A, Ferreira-González L, Meijide-Míguez H. Escalas de valoración funcional en el anciano. Galicia Clin 2011; 72 (1): 11-16. Irigoyen Coria A, Morales López H. El anciano y su familia. En: Hamui Sutton A, Martínez Gallardo L. (eds.) The Family Physician and the Care of the Elderly. Pan Am Fam Clin 2006;1:10-15. Guía Práctica Clínica para la Valoración Geronto-Geriátrica Integral en el Adulto Mayor Ambulatorio. México: Secretaría de Salud, 2011. Disponible en: www.cenetec.salud.gob.mx/interior/gpc.html Sanjoaquín Romero AC, Fernández Arín E, Mesa Lampré MP, García-Arilla Calvo E. Valoración geriátrica integral. Tratado de Geriatría para residentes. Capítulo 4. Disponible en: file:///C:/Users/Herlinda/Downloads/VALORACION%20GERIATRICA%20INTEGRAL.pdf

3. 4. 5.

Lecturas recomendadas4 : Salgado A, Alarcón M. a T. Valoración del paciente anciano. Barcelona: Ediciones Masson; 1993. Guillén Llera F, Pérez del Molino Martín J. Síndromes y cuidados en el paciente geriátrico. Barcelona: Ediciones Masson; 2001. Midón Carmona J. Depresión en el anciano. En: Cuadernos multidisciplinares de depresión. Madrid: Saned; 2003. p. 4158. Grupo de Demencias Sociedad Española de Geriatría y Gerontología. Demencias en Geriatría. Madrid: Natural Ediciones; 2005. Peña-Casanova J, Gramunt Fombuena N, Vich Fullá J. Test neuropsicológicos, fundamentos para una neuropsicología clínica basada en evidencias. Barcelona: Masson; 2004.

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Archivos en Artículo Editorial Vol.19 (1) 7-9 Medicina Familiar _________________________________________________________________________________ 2017

La atención a los ancianos y la medicina familiar Care for Elderly and Family Medicine

Arnulfo Irigoyen Coria,* Lourdes Santoyo Villaseñor, ** Martín Aceves Martínez. ** * Profesor Asociado C, Subdivisión de Medicina Familiar, División de Estudios de Posgrado, Facultad de Medicina, Universidad Nacional Autónoma de México. ** Médico Residente de segundo año de la especialidad en medicina familiar. Unidad de Medicina Familiar No. 20 de la Ciudad de México. Instituto Mexicano del Seguro Social.

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En 2006, había 50 millones de adultos mayores, cifra que se estima duplicará para 2025, y volverá a hacerlo para 2050, cuando una de cada 4 personas tendrá más de 60 años (en el mundo, serán 1 de cada 5). Además, las personas están viviendo más años de vida. Actualmente, una persona de 60 años puede esperar vivir hasta los 81, es decir 21 años más. En las últimas cinco décadas, se ganaron en promedio más de 20 años. En las Américas, más del 80% de las personas que nazcan hoy vivirán 60 años, y 42% de ellos pasarán los 80. En 2025, habrá aproximadamente 15 millones de personas de más de 80 años en la región.1

La medicina familiar a partir desde sus orígenes en México, ha tenido como uno de sus objetivos fundamentales el manejo integral de la población en todas las etapas de su vida. Uno de los rubros a los que menor atención se le ha prestado es precisamente el cuidado médico a los adultos mayores. Es en gran parte la responsabilidad del médico familiar: identificar factores de riesgo o de mal pronóstico; el manejo de las redes de apoyo, la relación médico paciente y la relación familia-médico-paciente. Algunas de las funciones más importantes del médico familiar ante el paciente geriátrico:    

mantener una vejez sana, establecer estrategias educativas para el propio enfermo y para su familia incorporar al paciente a programas de ejercicio físico (adecuados a sus condiciones particulares) vigilancia del estado neurológico de los pacientes.

En síntesis, evaluar su calidad de vida, así como orientarlo en los cambios que van presentando tanto su cuerpo, como sus actividades cotidianas e incluso los cambios que ocurran en sus redes de apoyo. Orientar a la familia en estos cambios, y ayudarlos a adaptarse a las limitaciones físicas y cognitivas del paciente y de ser factible: llevarlo a una muerte digna en su domicilio. El médico familiar deberá tener la capacidad para reconocer los diferentes tipos de familia, así como poder conocer la dinámica de la misma e identificar factores de riego en esta, intentando modificarlos o prevenirlos. Podemos afirmar que los objetivos primordiales del cuidado a los ancianos en el ámbito de la medicina familiar son dos:  

aportar ayuda que predisponga a una larga vida de bienestar, favorecer, en su momento, una muerte digna en el domicilio. 7

Irigoyen Coria A. y col.

Archivos en Medicina Familiar

Estos objetivos sólo pueden lograrse si están apoyados en actividades de promoción de la salud que prevengan el deterioro funcional, en la detección precoz de la incapacidad y en el ejercicio de los cuidados paliativos 2-5. Cinco elementos relacionados con la familia que el médico familiar no debería dejar de lado:     

La familia es una institución que juega un papel decisivo en el desarrollo psicosocial de sus integrantes. La familia desempeña un rol decisivo en la educación formal e informal, es en su espacio donde son integrados los valores éticos y humanísticos y donde se profundizan los lazos de solidaridad. La familia, como red social de apoyo, acrecienta su importancia con el envejecimiento de sus integrantes. La naturaleza de las relaciones con los hijos y las formas de la solidaridad intergeneracional son un elemento fundamental para el análisis de la calidad de vida en la senectud. Debe otorgarse una atención oportuna y adecuada en un de entorno apoyo, sencillez y facilidad. 2-5

Existen una serie de compromisos profesionales que los médicos familiares deben observar en cuanto al cuidado del paciente anciano. Algunas de estas responsabilidades se encuentran descritas en las estrategias del Programa de Salud del Adulto y del Anciano5: Capacitar al equipo de salud en la aplicación y desarrollo de los métodos más actuales para la detección, y manejo integral de las patologías crónico degenerativas. Incorporar un modelo que identifique y prevenga los factores de riesgo modificables que participan en el desarrollo de las patologías crónico degenerativas: Difundir, aplicar y vigilar el cumplimiento de las normas oficiales y las guías técnicas respectivas.2-7 Elementos que debe valorar el médico familiar:2         

Prestar especial cuidado a la información que ofrezca a los pacientes en particular a los ancianos. Tres propósitos deben cubrirse con la información: 1) conocer y comprender el proceso de la enfermedad, 2) explicar claramente el significado de los síntomas, 3) plantear cuáles son los objetivos del tratamiento y en su caso las acciones de rehabilitación. Verificar qué se está haciendo en favor del paciente. Corroborar que no se le haya abandonado tanto emocional como físicamente, y que en todo momento se haya procurado su mejor calidad de vida. Estar en condiciones de asegurar a la familia que su paciente contará con la disponibilidad, comprensión y apoyo del equipo de salud. Facilitar los procedimientos burocráticos propios de las instituciones de salud. Ayudar a los miembros de la familia en especial cuando se sienten desorientados y sobrecargados con múltiples necesidades. Las reacciones emocionales intensas, podrían entorpecer y dificultar las relaciones del paciente y alterar de manera esencial su calidad de vida. Identificar la estructura de la familia, en este caso es suficiente con utilizar la clasificación más sintética: familia nuclear, extensa y extensa compuesta. 8,9

Como médicos familiares nuestro compromiso es atender al paciente de manera integral. Valorar al cuidador principal el cual muchas veces presenta descuido de su propia salud, por procurar la del paciente por lo cual es adecuada identificarlo y apoyarlo en el proceso, así como también identificar y referir actores de riesgo en el, previniendo así la presencia de burnout en cuidadores.2 En resumen los médicos familiares, somos responsables, de orientar a nuestros pacientes adultos mayores para lograr así una mejor calidad de vida. Tenemos el deber de estar presentes durante la fase terminal de los pacientes -donde se intensifica el esfuerzo para los cuidados- y donde con frecuencia se modifica la dinámica familiar, es ahí en donde nosotros deberíamos orientar y apoyar a las familias que se encuentran bajo nuestra responsabilidad.

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Volumen 19 (1) enero-marzo 2017

Atención a pacientes en unidades de Cuidados Paliativos

Referencias 1.

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Archivos en Artículo Editorial Vol.19 (1) 11-13 Medicina Familiar ___________________________________________________________________________ 2017

El cuidado integral a los ancianos: el papel del médico familiar Comprehensive Care for the Elderly: the Role of the Family Physician Juan Pablo Salazar Reyes,* Arnulfo Irigoyen Coria.** * Médico Residente de segundo año de la especialidad en medicina familiar. Unidad de Medicina Familiar No. 20 de la Ciudad de México. Instituto Mexicano del Seguro Social. ** Profesor Asociado C, Subdivisión de Medicina Familiar, División de Estudios de Posgrado, Facultad de Medicina, Universidad Nacional Autónoma de México.

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Se necesita con urgencia una acción de salud pública integral sobre el envejecimiento. Aunque falta mucho por aprender, tenemos pruebas suficientes para actuar ahora, y hay algo que cada país puede hacer, independientemente de su situación actual o nivel de desarrollo. La respuesta de la sociedad al envejecimiento de la población requiere transformar los sistemas de salud para pasar de los modelos curativos centrados en las enfermedades a una atención integrada y centrada en la personas mayores. Habrá que desarrollar, incluso a partir de cero, sistemas integrales de cuidados a largo plazo. Y se necesitará una respuesta coordinada entre muchos otros sectores y distintos niveles de gobierno. Para ello hará falta un cambio fundamental de nuestra concepción del envejecimiento, a fin de tener en cuenta la diversidad de las poblaciones de edad y combatir las inequidades que a menudo subyacen al envejecimiento. Además, se deberán incorporar mejores formas de medir y monitorear la salud y el funcionamiento de las poblaciones de edad. Aunque estas medidas inevitablemente requerirán recursos, es probable que sean una buena inversión en el futuro de la sociedad: un futuro que ofrezca a las personas mayores la libertad de llevar una vida que las generaciones anteriores nunca hubieran imaginado. Informe mundial sobre el envejecimiento y la salud. 2015. 1

Un elemento esencial de la medicina familiar es el manejo integral. No debe soslayarse que el manejo integral engloba el dar un seguimiento y continuidad al paciente de la tercera edad, y no sólo al paciente sino también a los integrantes de la familia (eso es precisamente lo que nos caracteriza, a los médicos familiares). Estos pacientes tienden a ser más vulnerables, ya sea por alguna enfermedad crónica degenerativa o por alguna crisis de adaptación, bien sea por el ingreso a la etapa de retiro, la jubilación o por el hecho fallecimiento de un ser querido. Uno de los objetivos de la medicina familiar es el mejorar e incrementar la calidad de vida, la cual debe de ser sin sufrimiento, y con el fin de que el paciente se encuentre lo más integro que se pueda tanto físicamente, emocionalmente y espiritualmente. Fortaleciendo la funcionalidad mental la cual puede ser valorada por varios test como el Minimental, Barthel, Katz, Filadelfia, Pfeifer, los cuales nos pueden ayudar a la detección precoz de tendencia la incapacidad, el pronóstico de algún proceso de deterioro cognitivo y psicomotriz; también un punto de vista muy importante para los pacientes geriátricos es la valoración social ya que nos ayuda a entender el proceso de comunicación y de relaciones interpersonales que tienen en su entorno y su estructura social que le rodea; intervenir en la terapia ocupacional para restaurar funciones, aumentar la movilidad, estimular alguna vocación; y sobre todo hacer hincapié en la terapia recreativa ya que nos estimula el desarrollo psicomotriz y social, produce un estado de ánimo optimo, incremente la coordinación con otras personas.2 El médico familiar tiene compromisos profesionales con los ancianos:  Cuidado del paciente.  Capacitación del personal de la salud.

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 Renovar modelos sencillos para detección de enfermedades crónico-degenerativas, así como prevenir complicaciones agudas y tardías de dichas enfermedades.  Fortalecer factores protectores en el paciente y en su familia.  Disminuir y tratar de atenuar factores de riesgo que afecten al anciano y su entorno. Elementos que debería valorar el médico familiar antes de solicitar la ayuda de la familia para el manejo del paciente anciano 2:  Proporcionar información clara, concisa y realista.    

Conocer y comprender la enfermedad que padece de manera sencilla, así como informar a los familiares en qué consiste dicho padecimiento. Explicar signos y síntomas, además cuales pueden ser datos de alarma para el paciente y pueda acudir a un servicio de urgencias antes de que se pueda complicar alguna situación. Explicar tratamiento y las metas para mejorar una calidad de vida satisfactoria. Plantear medidas en conjunto que puedan mejorar la relación médico-paciente-familia.

 Encontrar redes de apoyo, ya se algún familiar, vecino, el personal de salud, o integrar al paciente a un grupo de ayudo, o un programa como los que cuenta el IMSS, con ayuda del personal de trabajo social.  Ayudar a paciente con los procedimientos burocráticos, ya sea por el actualizar una indicación terapéutica, algún fármaco, o algún estudio, el cual se puede realizar con las ventajas de la tecnología y el mejoramiento del sistema electrónico, y así como disminuir el uso de firmas de directivos y sellos de vigencia.  Respetar la intimidad e integridad del paciente, tanto la parte física, emocional y espiritual; y ser siempre cordial, el realizar una entrevista adecuada y una exploración adecuada sin sobrepasar y aprovechar o tener un beneficio propio.  Ayudar a los miembros de la familia, ante alguna duda o circunstancia que se encuentre en nuestras manos, pero dejando claro que es para beneficio del paciente y sin ningún interés particular, siempre respetando la relación médico-paciente-familia.  Mejorar la comunicación con los demás integrantes familiares, personal de salud y con la sociedad en sí. Un punto muy importante en el que se debe contemplar, es la posibilidad de generarse el Síndrome de Burnout en los cuidadores de los ancianos. 2-5 Este es un problema de salud pública que va en aumento y que no sólo repercute en la salud de en los cuidadores primarios sino en los profesionales de la sanidad; el cual evidentemente afectada la calidad de vida del paciente enfermo, deteriora la relación médico-paciente-familia y supone un alto coste tanto para el paciente como el cuidador y sobre todo para la familia. A los cuidadores primarios hay que explicar y recordar siempre la importancia que tienen, mencionarle que tiene el derecho de pedir ayuda u orientación sobre alguna circunstancia en la que se encuentre para así tomar medidas preventivas en un futuro y realizar estrategias para mejorar su ambiente en todos los aspectos y puede desempeñar un mejor trabajo de cuidador sin olvidar el resto de sus labores, lo cual beneficiará de manera personal, profesional e institucional como la calidad de atención al paciente y su familia.2-5

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Volumen 19 (1) enero-marzo 2017

Ancianos y el rol del médico familiar

Referencias 1.

Biblioteca de la OMS: Informe mundial sobre el envejecimiento y la salud. 2015:243. Disponible en: http://apps.who.int/iris/bitstream/10665/186466/1/9789240694873_spa.pdf?ua=1&ua=1

2. 3.

Trigás-Ferrín A, Ferreira-González L, Meijide-Míguez H. Escalas de valoración funcional en el anciano. Galicia Clin 2011; 72 (1): 11-16. Irigoyen Coria A, Morales López H. El anciano y su familia. En: Hamui Sutton A, Martínez Gallardo L. (eds.) The Family Physician and the Care of the Elderly. Pan Am Fam Clin 2006;1:10-15. Guía Práctica Clínica para la Valoración Geronto-Geriátrica Integral en el Adulto Mayor Ambulatorio. México: Secretaría de Salud, 2011. Disponible en: www.cenetec.salud.gob.mx/interior/gpc.html Sanjoaquín Romero AC, Fernández Arín E, Mesa Lampré MP, García-Arilla Calvo E. Valoración geriátrica integral. Tratado de Geriatría para residentes. Capítulo 4. Disponible en: file:///C:/Users/Herlinda/Downloads/VALORACION%20GERIATRICA%20INTEGRAL.pdf

4. 5.

Lecturas recomendadas4 : Salgado A, Alarcón M. a T. Valoración del paciente anciano. Barcelona: Ediciones Masson; 1993. Guillén Llera F, Pérez del Molino Martín J. Síndromes y cuidados en el paciente geriátrico. Barcelona: Ediciones Masson; 2001. Midón Carmona J. Depresión en el anciano. En: Cuadernos multidisciplinares de depresión. Madrid: Saned; 2003. p. 4158. Grupo de Demencias Sociedad Española de Geriatría y Gerontología. Demencias en Geriatría. Madrid: Natural Ediciones; 2005. Peña-Casanova J, Gramunt Fombuena N, Vich Fullá J. Test neuropsicológicos, fundamentos para una neuropsicología clínica basada en evidencias. Barcelona: Masson; 2004.

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Archivos en Artículo Editorial Vol.19 (2)23-29 Medicina Familiar ______________________________________________________________________________ 2017

Reflexiones sobre el anciano y la cultura del envejecimiento Reflections on the Elderly and the Culture of Aging

Montaño Portillo Martín Eduardo,* Arnulfo Irigoyen Coria.** * Médico Residente de segundo año de la especialidad en medicina familiar. Unidad de Medicina Familiar No. 94 de la Ciudad de México. Instituto Mexicano del Seguro Social. ** Profesor Asociado C, Subdivisión de Medicina Familiar, División de Estudios de Posgrado, Facultad de Medicina, Universidad Nacional Autónoma de México.

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En tiempos de retos impredecibles para la salud, ya sea a causa del cambio climático, de nuevas enfermedades infecciosas o de la próxima bacteria que se haga resistente a los antibióticos, una tendencia es segura: el envejecimiento de la población se está acelerando en todo el mundo. Por primera vez en la historia, la mayoría de las personas pueden aspirar a vivir hasta más allá de los 60 años. Esto tiene profundas consecuencias para la salud y para los sistemas de salud, su personal y su presupuesto. Margaret Chan 1

Introducción En la actualidad nos enfrentamos a una situación sin precedentes: pronto existirán más personas mayores que niños y más personas en extrema edad avanzada como nunca antes, hecho que ya se está observando en algunos países desarrollados y sin lugar a dudas también se observará este cambio sociodemográfico en los países como México. Debido a estos cambios vertiginosos las familias tendrán que saber aprender afrontar este efecto tan directo que muchas de ellas aún no ven la magnitud que hará cambiar las relaciones y roles como familia. Cada sociedad ha adoptado medidas preventivas y soluciones a los problemas que plantean los ancianos. Por ejemplo, cuando los esquimales sienten que son una carga para la familia porque ya no pueden con los quehaceres de la casa, la pesca o de la caza, prefieren morir con honor al cobijo de la nieve, dejarse caer en el agua o ser devorados por algún depredador. En México, los relatos precolombinos confirman que el anciano era el conocedor de los misterios y designios, por lo cual recibían el respeto de su comunidad. Es más, uno de sus dioses principales era Huehuetéotl, el dios viejo, el guardián del fuego sagrado, y en el mundo maya su equivalente era Khin 2. La población en su mayoría estará compuesta por personas de mayor edad, esto acompañado de un período más prolongado de buena o mala salud, según sea el caso, con esto surgen dudas que muchos ni siquiera se han planteado; ¿Ésta mayor esperanza de vida es sinónimo de mejor calidad de vida al tener mayor participación social o se asociará con más enfermedades, discapacidad y dependencia? ¿Cómo afectará el envejecimiento a los costos sanitarios y sociales? ¿Son estos futuros inevitables, o podemos actuar para establecer una infraestructura física y social que pueda otorgar salud y bienestar en la vejez? etc. 2 Se realizó un informe por parte de dos Instituciones: el Instituto Nacional del Envejecimiento y el Instituto Nacional de Salud en donde se trabajaron diversas cuestiones para prevenir todos estos fenómenos que traerá el envejecimiento global de las familias. Para ello, las naciones deben registrar sistemas de datos y mejorar la capacidad de investigación para monitorear y comprender estos patrones y relaciones 3. La gestión del envejecimiento de la población también requiere la creación de la infraestructura e instituciones necesarias tan pronto como sea posible, cuanto más nos demoremos, más cos-

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tosas y menos eficaces serán las posibles soluciones; el espectacular aumento de la esperanza de vida media durante el siglo XX ya ha sido clasificado como uno de los mayores logros de la humanidad. Simone de Beauvoir expresa que tanto el sentido que los hombres dan a su existencia como su sistema global de valores son los que definen la estimación y el valor de la ancianidad. A la inversa, por la forma en que una sociedad se comporta con sus viejos descubre, sin equívoco, la verdad –a menudo, cuidadosamente enmascarada– de sus principios y fines 4. Esta transición abarca un amplio conjunto de cambios que incluyen una de alta a baja fertilidad; un aumento constante en la esperanza de vida al nacer y en edades más avanzadas; y un cambio en las principales causas de muerte antes por enfermedades infecciosas y parasitarias y actualmente por enfermedades no transmisibl es y enfermedades condiciones. Esta cultura de veneración al anciano ha sufrido cambios en la sociedad moderna -debido a las modificaciones en la estructura familiar, la globalización, la extrema pobreza y la insuficiencia en los sistemas de seguridad social, entre otros factores- que dificultan la permanencia con bienestar de los ancianos, incluso con respuestas sociales gerontofóbicas. Ante esta situación, hay que crear alternativas viables que reconozcan nuevamente el valor de las personas de 60 años de edad y más en la sociedad. La realidad social del adulto mayor mexicano tiene facetas múltiples y con ello innumerables aspectos que retan a todo aquel profesional interesado en este grupo de edad, por lo que se plantea:   

crear las políticas públicas más efectivas y eficientes a planificar acciones que prevengan toda clase de riesgos en los ancianos evitar la exclusión social y el maltrato en contra los miembros de este grupo de edad

dicha exclusión minimiza su funcionalidad física, mental, social y provoca el desconocimiento de sus más elementales derechos humanos 2-,4. El tema de los adultos mayores ha sido estudiado por la Gerontología, que es la ciencia que analiza el proceso de envejecimiento desde los ámbitos biológico, psicológico y social 5. Por todo ello el apoyo familiar y el cuidado de las generaciones suelen correr en ambas direcciones. Las personas mayores a menudo prestan atención a una variedad de los demás (cónyuges, padres, hijos, nietos y a menudo a no miembros de la familia), mientras que diversas familias, y especialmente los adultos jóvenes son fuente primaria de apoyo para el cuidado de sus parientes mayores, llamados; cuidadores primarios. Sin embargo, en países con bajas tasas de natalidad, las generaciones futuras tendrán menos cuidadores primarios, repercutiendo en la atención del adulto mayor, en el núcleo familiar y en la salud individual. La tendencia mundial hacia el envejecimiento poblacional global asegura que habrá menos atención y apoyo potenciales para las personas hacia sus familias en el futuro. A medida que aumenta la esperanza de vida en la mayoría de las naciones, aumentan las probabilidades de que varias generaciones están vivas al mismo tiempo. Los Médicos Familiares y todo el personal de salud como equipo de una Unidad de Medicina Familiar -enfermeras, trabajo social, asistentes médicos, personal administrativo- deberían estar pensando el ¿Por qué estudiar el envejecimiento?, ¿acaso será el comienzo de algo nuevo?, para ello se han desarrollado y analizado en inmensos estudios cuyo objetivo principal es conocer todo lo relacionado al envejecimiento y su ambiente, como lo es el Estudio Longitudinal de Baltimore sobre el Envejecimiento (The Baltimore Longitudinal Study of Aging, BLSA)6, donde se observó y se documentaron las características físicas, mentales y emocionales del envejecimiento en las personas sanas y activas. Al estudiar el envejecimiento normal, los científicos asocian algunos estereotipos de los adultos mayores con el grado de salud en el envejecimiento. Analizando datos de personalidad a largo plazo, científicos del BLSA descubrieron que la personalidad de un adulto generalmente no cambia mucho después de los 30 años. Lo que significa que las personas que son alegres y asertivas a la edad de 30 años probablemente lo serán a los 80 años. El hallazgo sugiere que los cambios de personalidad no se deben al envejecimiento normal, en su lugar puede estar relacionado con la falta de atención y cuidado hacia el aciano, la mala afectividad hacia él, evidenciando la afectación de las funciones básicas y la integridad de la familia con resultados directos en apariciones de enfermedades del anciano, como la demencia, resultado de un envejecimiento anormal. 6

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Volumen 19 (2) abril-junio 2017

Reflexiones sobre el anciano la familia

El vínculo entre envejecimiento y enfermedad está bien establecido, por el riesgo de desarrollar muchas enfermedades aumenta con edad. Una de las mayores contribuciones del BLSA a la ciencia biomédica es su capacidad para investigar esta relación. 6 El The National Institute on Aging (NIA) -parte de los Institutos Nacionales de los Estados Unidos de América- fue establecido para mejorar la salud y el bienestar de las personas mayores mediante la investigación. Puede decirse que su objetivo principal es aumentar la "esperanza de vida activa", el número de años libre de discapacidad y la promoción de la longevidad activa. La calidad de vida en las personas adultas mayores se puede definir como: “aquella que se funda en el gozo tranquilo y seguro: de la salud y la educación, de una alimentación suficiente y de una vivienda digna, de un medio ambiente estable y sano, de la justicia, de la igualdad entre sexos, de la responsabilidad de la vida cotidiana, de la dignidad y de la seguridad” 7.

La cultura del envejecimiento permite añadir vida a los años y no años a la vida El apoyo social para los adultos mayores es de suma importancia, debido a que las tendencias sociodemográficas en México indican una clara disminución poblacional de niños y jóvenes, así como un aumento considerable de las personas mayores, por lo que se espera que en el 2050 habrá aproximadamente 41.4 millones de habitantes con más de 60 años. Muchos de los ancianos perderán su capacidad de vivir independientemente por su limitada movilidad, debilidad, o cualquier otra disminución de la capacidad física o cognitiva. Muchos requerirán alguna forma de cuidado a largo plazo que incluya:   

cuidados de una enfermera en el hogar participación de un cuidador de la propia familia o bien apoyo comunitario cuidados de larga duración en hospitales de alta especialidad

Los significativos costos asociados con la prestación de estos servicios, tendrán que ser financiados por las familias y la sociedad. 8 La necesidad futura de servicios de atención a largo plazo (tanto formales como informales) podría ocasionar en los cuidadores serios problemas incluyendo el conocido síndrome de burnout. Por estas circunstancias se vislumbra la urgente necesidad de fortalecer la relación intergeneracional y que los grandes “tomadores de decisiones políticas” dirijan y presten atención a la salud del cuidador. El gran objetivo de los programas de salud desde la atención primaria es: mantener a las personas mayores sanas más tiempo, retrasar o evitar la discapacidad y la dependencia, sin afectar sobre todo la salud del cuidador primario. 8

Conclusión En un país como México, que aspira al tránsito de un país emergente a una nación desarrollada. Los factores psicológicos, sociales y económicos que acompañan al complejo panorama de la atención a los ancianos -en los que se observa una mortalidad descendente junto a una morbilidad creciente- constituyen condiciones que varían de manera importante no sólo durante la vejez sino a lo largo de la vida. Éste es precisamente un enorme reto para los especialistas en medicina familiar.

Referencias 1. 2.

Chan M. Prólogo. Biblioteca de la OMS: Informe mundial sobre el envejecimiento y la salud. 2015. Disponible en: http://apps.who.int/iris/bitstream/10665/186466/1/9789240694873_spa.pdf?ua=1&ua=1 García Ramírez JC. La vejez, el grito de los olvidados, Manufactura, AC, Plaza y Valdés Editores, México, 2003, (pp. 58-74).

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Montaño Portillo E. y col.

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Archivos en Medicina Familiar

National Institute on Aging. National Institutes of Health. Global Health and Aging. Publication no. 11-7737. October 2011. Disponible en: http://www.who.int/ageing/publications/global_health.pdf. De Beauvoir, Simone, La Vejez, Editorial Sudamericana, Buenos Aires, 1970. Mendoza Nuñez VM. Gerontología Comunitaria, Conacyt, México, 2004. Richard J, Hodes Dan L. Longo, M.D. Healthy Aging. Lessons from the Baltimore Longitudinal Study of Aging. National Institute On Aging. Publication Number 08-6440 September 2008. (pp. 1-7).Avalaible: https://www.nia.nih.gov/sites/default/files/healthy_aging_lessons_from_the_baltimore_longitudinal_study_of_aging.pdf. National Institute on Aging. National Institutes of Health. Global Health and Aging. Publication no. 11-7737. October 2011. Avalaible: http://www.who.int/ageing/publications/global_health.pdf. Cabrera G. México. El Destino Demográfico que se anuncia a mitad del Siglo XXI. En: La Población de México, Situación Actual y Desafíos Futuros. Conapo, Secretaría de Gobernación. 2000. México. Martínez T, Suárez J, Yanguas J, Muñiz J. The Person Centered Approach In Gerontology: New Validity Evidence Of The Staff Assessment Person-Direcet Care Questionnaire. International Journal Of Clinical Health Psychology. 2016;16:175-185. Avalaible: http://www.psicothema.com/pdf/4300.pdf.

Archivos en Artículo Editorial Vol.19 (2) 27-30 Medicina Familiar ___________________________________________________________________________ 2017

La atención a los ancianos: asignatura pendiente para la medicina familiar Care for the Elderly: Pending Subject for Family Medicine Arnulfo Irigoyen Coria,* Martin Isaac Aceves Martínez, ** Yessica María de Jesús Sandoval Reynoso,** Paola Monserrat Romero Torres, ** Verónica Morelos Romero ** * Médico Residente de segundo año de la especialidad en medicina familiar. Unidad de Medicina Familiar No. 94 de la Ciudad de México. Instituto Mexicano del Seguro Social. ** Profesor Asociado C, Subdivisión de Medicina Familiar, División de Estudios de Posgrado, Facultad de Medicina, Universidad Nacional Autónoma de México.

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… el envejecimiento saludable es algo más que la ausencia de enfermedad. Para la mayoría de las personas mayores, lo más importante es mantener la capacidad funcional. Los mayores costos para la sociedad no son los gastos que se hacen para promover esa capacidad funcional, sino los beneficios que podrían perderse si no realizamos las adaptaciones e inversiones apropiadas. El enfoque recomendado ante el envejecimiento de la población, que tiene en cuenta la sociedad e incluye el objetivo de construir un mundo favorable a las personas mayores, requiere transformar los sistemas de salud del modelo curativo a la prestación de cuidados integrales, centrados en las necesidades de las personas mayores. Margaret Chan 1

La familia, como red social de apoyo La familia es una institución que cumple una importantísima función social como transmisora de valores éticos y culturales; por lo que juega un decisivo papel en el desarrollo psicosocial de sus integrantes En referencia al rol determinante de la familia para el desarrollo social y el bienestar de sus miembros, se plantea que: la familia es la que proporciona los aportes afectivos y sobretodo materiales necesarios para el desarrollo y bienestar de sus miembros. El grupo familiar desempeña un rol decisivo en la educación formal e informal, es en su espacio donde son absorbidos los valores éticos y humanísticos y donde se espera que los lazos de solidaridad se afiancen. 2 Es una verdad incontrovertible que la familia como red de apoyo social, acrecienta su importancia con el envejecimiento de sus integrantes. Situación condicionada por la reducción de la actividad social, de esta manera el anciano le otorga un mayor valor al espacio familiar, el cual casi siempre será un baluarte de apoyo. Con el envejecimiento -la problemática familiar- se hace cada vez más compleja, entre otros factores, por la “superposición de generaciones” con diferentes necesidades y demandas que proceden de diversos sistemas normativos. 2 Abordar la problemática del envejecimiento como un complejo proceso -tanto humano como médico social- obliga al médico especialista en medicina familiar a:   

conocer el rol del anciano dentro de la estructura y la dinámica de la familia identificar la naturaleza de las relaciones con y entre los hijos señalar con claridad las formas de la solidaridad intergeneracional

estos tres elementos son fundamentales para el análisis de la calidad de vida en el escenario médico familiar.

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Archivos en Medicina Familiar

El médico familiar y los cuidadores de los ancianos El papel del médico familiar ante el proceso de envejecimiento -es de elevada importancia- puesto que le permite una intervención oportuna y adecuada con un enfoque humano e integral. Esto es que en todo momento haga el esfuerzo por ayudar a los familiares de su paciente anciano -a dilucidar el proceso de envejecimiento con las consecuencias que este conlleva-.3 En general, el personal del equipo de salud en las unidades y clínicas de medicina familiar no sabe con precisión ¿cuál es la situación de salud y las expectativas de los cuidadores de los pacientes ancianos? Mientras más sepamos del cuidador estaremos en mejores condiciones de satisfacer las necesidades del paciente anciano. Quienes asumen la tarea del cuidado saben que la dignificación que trae consigo el cuidado, no es un beneficio inestimable, sólo para la persona cuidada sino también para el cuidador mismo. Debería quedar establecido no solamente en la normatividad -sino en el actuar cotidiano- que el equipo de salud tiene un rol fundamental, constituido por dos pilares: por un lado ofrecer conocimientos y competencias que mejoren la calidad del cuidado y por otro, facilitar un soporte emocional -empático- para los cuidadores. Los médicos familiares deberíamos lograr que -los cuidadores de los pacientes ancianos- sientan que los valoramos, que reconocemos su labor y que no somos sus punzantes críticos. No debemos olvidar que realizan su trabajo sin mayores conocimientos y además -en no pocas ocasiones- con carencia de recursos materiales. El cuidar constituye una expresión profundamente humana: vernos reflejados en el “otro”, es decir, vernos reflejados nosotros mismos. Porque también nosotros, los que en la actualidad estudiamos la especialidad en medicina familiar, ineludiblemente, seremos los adultos mayores del mañana. Con esta forma de pensar estaremos más cerca de cuidar al “otro” cómo me gustaría que me cuidaran a mí el día de mañana. La tarea no es fácil, la familia se enfrenta con frecuencia y en ocasiones de manera repentina con un padre, madre, abuelo o abuela, profundamente deteriorados. El problema más serio se presenta cuando el anciano sufre de algún tipo de demencia o incluso de Alzheimer. González Rodríguez 4 ha descrito con minuciosidad el panorama de los cuidadores ante el paciente con Alzheimer, en la población de Salamanca, España: El 70%-80% de los pacientes afectados de demencia se encuentran en su domicilio. En el

68%-80% de los casos, el paciente recibe los cuidados de una sola persona (cuidador principal). El perfil de este cuidador es el de una mujer, de unos 50-60 años, cuyo parentesco es de hija/o (45%-60%), esposo/a (9%-31%), hermanos, y otros el resto, de los que sólo el 17%-20% trabajan fuera de casa. El 60% dedican 20 horas al día a los cuidados del enfermo, ya que son responsables de él tanto de día como de noche. Entre el 11% y el 23% de las familias reciben ayuda externa de un cuidador profesional. Algunas actuaciones pueden facilitar las funciones de un cuidador de un enfermo de Alzheimer:       

implantar rutinas para generar automatismos que faciliten las actividades habituales buscar apoyo y ayuda familiar, social e institucional prevenir accidentes domésticos y la incorporación de otras morbilidades establecer pautas de cuidados higiénicos potenciar la autonomía del enfermo y el autocuidado del cuidador procurar hablar al enfermo de forma sencilla y tranquila actuar con “inteligencia” ante sus negativas y manías

en definitiva, ayudar, sin crear dependencia de forma temprana.5 La vida de las personas que atienden a una persona mayor dependiente -puede verse afectada de muchas maneras-. Es frecuente que experimenten cambios en: las relaciones familiares, el trabajo y su situación económica, su tiempo libre, su salud o su estado de ánimo. El carácter de estas transformaciones también puede ser positivo, aunque se tienda a conside28

Volumen 19 (2) abril-junio 2017

Atención a los ancianos: asignatura pendiente

rar sus consecuencias como “sólo exclusivamente negativas”. El cuidado de una persona mayor puede ser, a pesar de las dificultades y la “dureza” de la situación, una experiencia muy satisfactoria para el cuidador. Ocurre así cuando esta labor supone luchar por alguien a quien se quiere, a quien se desea expresar cariño e interés. En ocasiones, los cuidadores descubren que poseen cualidades que hasta entonces no conocían y no son pocos los que manifiestan haber “evolucionado” como personas a través de las situaciones asociadas al cuidado. Más de un cuidador se ha dicho a sí mismo afirmaciones como éstas: “Cuando ya estás agotado te queda el cariño”. “Ella no quiere más que estar conmigo. Y yo con ella.” “La verdad es que nos hacemos compañía”. “Si ayudaba a otros, ¿cómo no iba a ayudar a mi madre? Mi madre es mi madre. A mi madre la llevo dentro…”. Hoy en día el número de pacientes ancianos atendidos en la consulta externa y en las unidades de hospitalización es elevado, siendo una de las principales causas las patologías crónico degenerativas; esto a su vez aumenta en gran medida los costos en salud y en la morbimortalidad de este grupo etario. El médico familiar está entrenado para ofrecer y educar en la prevención de una gran diversidad de enfermedades; debe identificar y evitar factores de riesgo que amenazan la salud de su paciente. También lo está para ofrecer tratamiento farmacológico, tratar a la familia o en su caso derivar a otros especialistas los problemas de salud que no se encuentre en condiciones de resolver. El acelerado envejecimiento poblacional En la actualidad estamos viviendo el fenómeno demográfico conocido como envejecimiento poblacional; en el cual la mayoría de la población está constituida por personas mayores de 60 años. Aunado a esto debemos destacar la alta frecuencia de enfermedades crónico-degenerativas, lo cual implica mayor demanda de los servicios de salud, así como mayor demanda para la familia y finalmente para el cuidador primario ya sea formal e informal. El aislamiento y la soledad en el anciano sigue siendo cada vez más patente en una sociedad inmersa en una creciente competitividad y deshumanización. La población experimenta la soledad y el abandono social, en un entorno de estrés y violencia, lo que ha ocasionado importantes cambios sociales y culturales que han venido a neutralizar los valores tradicionales que protegían a la familia y en especial a los adultos mayores. Está demostrado que el cuidado del paciente crónico con complicaciones requiere tanto del aporte interdisciplinario como de la atención en el hogar. En consecuencia, es necesario considerar a la familia como una “extensión” del equipo de salud para el cuidado de estos enfermos. Y para hacer más efectiva y eficiente está “colaboración” el propio equipo de salud se debe comprometer a capacitar a esos cuidadores que proceden de la propia familia. Nosotros como médicos familiares debemos identificar a las familias en donde el abandono de los ancianos represente un alto riesgo. Para este propósito, resulta imprescindible valorar factores asociados como:         

personalidad del anciano longevidad evolución de las enfermedades crónico-degenerativas disfunciones familiares estrés del cuidador problemas económicos falta de apoyo familiar deterioro funcional abuso de drogas o alcohol y la historia previa de violencia en la familia.

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Referencias 1.

2. 3. 4.

Chan M. Prólogo. Biblioteca de la OMS: Informe mundial sobre el envejecimiento y la salud. 2015. Disponible en: http://apps.who.int/iris/bitstream/10665/186466/1/9789240694873_spa.pdf?ua=1&ua=1 Irigoyen Coria A, Morales López H. El anciano y su familia. En: Hamui Sutton A, Martínez Gallardo L. (eds.) The Family Physician and the Care of the Elderly. Pan Am Fam Clin 2006;1:10-15. González Rodríguez VM, et al. La enfermedad de Alzheimer. SEMERGEN 2004;30(1):18-33. González VM, Martín C, editores. Demencias en Atención Primaria. Diagnóstico temprano y seguimiento. Salamanca, 2002. Citado en: González Rodríguez VM, et al. La enfermedad de Alzheimer. SEMERGEN 2004;30(1):18-33.

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Archivos en Artículo Editorial Vol.19 (2) 29-31 Medicina Familiar ____________________________________________________________________________ 2017

La salud del paciente anciano: reto para la medicina familiar Health of the Elderly Patient: a Challenge for Family Medicine Arnulfo Irigoyen Coria,* Jessica Morales Prado, ** Yunuen Lucero Campos Moreira** Pedro Edwin Olvera de la Rosa ** Lourdes Thalía Uribe Nava ** * Médico Residente de segundo año de la especialidad en medicina familiar. Unidad de Medicina Familiar No. 94 de la Ciudad de México. Instituto Mexicano del Seguro Social. ** Profesor Asociado C, Subdivisión de Medicina Familiar, División de Estudios de Posgrado, Facultad de Medicina, Universidad Nacional Autónoma de México.

________________________________________________________________________________________

Datos empíricos demuestran que la pérdida de capacidad generalmente asociada con el envejecimiento solo se relaciona vagamente con la edad cronológica de una persona. No existe una persona mayor “típica”. La diversidad resultante en las capacidades y las necesidades de salud de las personas mayores no es aleatoria, sino que se basa en hechos ocurridos a lo largo del curso de la vida que a menudo pueden modificarse, lo que pone de manifiesto la importancia del enfoque del curso de la vida. Aunque a la larga la mayoría de las personas mayores experimentarán múltiples problemas de salud, la edad avanzada no implica dependencia. Además, contrariamente a lo que suele suponerse, el envejecimiento tiene mucha menos influencia en los gastos en atención de la salud que otros factores, como el alto costo de las nuevas tecnologías médicas. Margaret Chan 1

Los adultos mayores tienen mucho que ofrecer a la sociedad: tienen sabiduría y experiencia; al mantenerlos saludables, funcionales e independientes, pueden continuar favoreciendo a sus comunidades y a sus familias y lo más importante: podrían ser serán más felices. De ahí que se recomienden 12 actitudes que le permitan al adulto mayor ser un integrante respetado y valorado en todo momento en el marco de la familia 2:           

Actitud de comprensión hacia los miembros de la familia. Aceptar a cada uno con sus actitudes positivas y negativas. Mostrarse prudentes, discretos y con mucho tacto en su actuar con los miembros de la familia. Escuchar y hablar lo justo y necesario, cuidar de no herir. No dar consejos no solicitados. Ceder mucho, especialmente con los adolescentes y jóvenes, de manera que para ellos sea un agrado el venir a la casa de los abuelos. Tratar de ayudar sin imponer criterios. Mantener una buena comunicación de confianza y mucho diálogo. Compartir situaciones, actividades, decisiones. Evitar discusiones y conflictos. No inmiscuirse en la vida de los hijos sino dejar que ellos hagan su vida como estimen conveniente.



No ser quejumbroso y negativos.

Las enfermedades degenerativas afectan a todos los grupos de edad y a todas las regiones y países. Por lo que se requiere prestar atención a este tipo de patologías, ya que existe mayor prevalencia en los grupos de edad más avanzada. Los adultos y ancianos son vulnerables a los factores de riesgo que favorecen las enfermedades crónico-degenerativas, tales como ingerir alimentos contaminados, la inactividad física, la exposición al humo del tabaco o el uso nocivo del alcohol, entre muchas otras. 29

Irigoyen Coria A. y cols.

Archivos en Medicina Familiar

La influencia de la sociedad puede expresarse de manera paradigmática en la urbanización explosiva y en consecuencia no planificada, modos de vida poco saludables y el propio “explosivo” envejecimiento de la población. Por ello es indispensable que cada paciente sea consciente de su enfermedad y asuma responsablemente tanto el tratamiento fármacológico como el no farmacológico. De esta manera se contribuiría significativamente a evitar complicaciones a corto y largo plazo, mejorando la calidad de vida del paciente. Las personas de la tercera edad se ven enfrentadas a muchas pérdidas. 2,3 Algunas de estas son:      

la presbicia disminución de las habilidades cognitivas como la memoria muerte de hermanos y otros familiares cercanos pérdida de la independencia al no poder, en muchas ocasiones, valerse por sí mismos incorporación a la etapa de retiro pensiones insuficientes

este deterioro en general afecta su pleno desarrollo y favorece un deficiente apego a los tratamientos, lo que condiciona complicaciones y una mala calidad de vida. Por lo tanto, resulta indispensable que el paciente cuente con una red de apoyo amplia, que le ayude y le apoye en la compresión de su enfermedad, la organización de sus medicamentos, y la modificación de los principales factores de riesgo. Para cada adulto mayor, la familia ocupa un lugar importante en su vida y cada uno le da un significado muy personal. Debido a las circunstancias propias de la tercera edad, necesitan una familia que los apoye y los sostenga, que les explique su enfermedad, y los guíe a lo largo de su padecimiento, para obtener así los beneficios de un adecuado y efectivo acompañamiento. La familia es el primer y más importante nivel de apoyo al anciano, en ella nació, a ella se dedicó; por lo que es de esperar que en ella se mantenga durante su senectud. El apoyo emocional forma parte importante en la adaptación y superación de problemas de cualquier índole, la forma de lograrlo es escucharlos, comprenderlos mirándolos siempre de frente y a la misma altura, brindándoles algo de nuestro tiempo. Estas acciones tampoco cuestan y pueden resultar experiencias favorables para el que las realiza y las disfruta. La familia debe facilitar en el anciano: el eficiente descanso, el empleo de su tiempo libre, el disfrutar en la medida de lo posible las actividades cotidianas, en concordancia con sus limitaciones visuales, auditivas y motrices -entre otras-. La experiencia nos ha hecho ver que la comprensión, la tolerancia y la sensibilidad dan la fortaleza necesaria para emprender facilitar en el anciano el vivir con optimismo y dignidad.3

Recomendaciones para el médico familiar El médico familiar debe tener especial cuidado en verificar que el cuidador tenga posibilidades reales de cuidado (proximidad y condiciones físicas). Que tenga un nivel aceptable de relación afectiva con el paciente; que el cuidador inspire seguridad y confianza; que cuente con la suficiente capacidad intelectual (no deficitaria) y suficiente nivel cultural; que tenga sentido de responsabilidad y goce de salud mental. Que haya dado muestras de actitudes para el apoyo, pero no haber asumido conductas sobreprotectoras ni paternalistas 4,5. El médico familiar y su equipo de salud deberían verificar que el enfermo anciano se encuentre en una habitación cómoda y con pocos ruidos, sábanas sin arrugas, secas y limpias. Cuando se encuentre en cama que la cabeza se localice más elevada que el cuerpo. Que se hayan realizado los cuidados mínimos como: limpieza de la boca limpieza de la lengua y las encías hidratación de los labios con vaselina detectar el sentido individual que tiene el “confort” para cada paciente 4,5.

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Volumen 19 (2) abril-junio 2017

La salud del paciente anciano

Y cuando se llegue a la etapa final del enfermo anciano, podríamos ayudar a los pacientes y a sus familiares aumentando el número y duración de las visitas, intensificando los cuidados al enfermo, aplicando las medidas de urgencia en caso de hemorragias, vómito, agitación, etc.; evitando crisis de claudicación emocional en la familia; teniendo siempre en cuenta que, aunque el enfermo esté obnubilado o en coma, puede tener percepciones, por lo que debemos ser muy cautos con lo que hablemos delante de él. Resulta necesario comprender la necesidad de considerar a la familia como parte del equipo multidisciplinario en el cuidado de estos enfermos. La familia es quien más tiempo está con el enfermo y por lo tanto es la que debe llevar a cabo los cuidados de la manera más integral posible, al realizar el baño, la alimentación, la administración de medicamentos, el apoyo, el contacto físico, etc. Las relaciones satisfactorias: paciente-familiares y médico familiar-paciente-familia requieren de paciencia, compromiso y aceptación. Sin estos factores la relación médicopaciente podría convertirse en una fuente de estrés y frustración anulando la posibilidad de realizar una ayuda efectiva al anciano enfermo. 6-8 Los médicos familiares -en colaboración con el equipo de salud- somos los encargados de entrenar a los cuidadores de pacientes, en el conocimiento de las patologías que padecen los propios ancianos. Pero no solo eso, somos los responsables de vigilar de igual manera la salud del cuidador, de poner el máximo empeño para evitar que caiga en el desgaste tanto físico como emocional.

Referencias 1.

2. 3. 4. 5.

6.

7.

8.

Chan M. Prólogo. Biblioteca de la OMS: Informe mundial sobre el envejecimiento y la salud. 2015. Disponible en: http://apps.who.int/iris/bitstream/10665/186466/1/9789240694873_spa.pdf?ua=1&ua=1 Placeres Hernández José Fernando, de León Rosales Lázaro, Delgado Hernández Inés. La familia y el adulto mayor. Rev. Med. Electrón. [Internet]. 2011; 33( 4 ): 472-483. Disponible en: http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S168418242011000400010&lng=es. Relaciones familiares y sentimentales del adulto mayor Disponible en: http://www.elhospitalblog.com/vida_sana/cuidados-del-adulto-mayor/relaciones-familiares-y-sentimentales-del-adulto-mayor/ Irigoyen Coria A, Morales López H. El anciano y su familia. En: Hamui Sutton A, Martínez Gallardo L. (eds.) The Family Physician and the Care of the Elderly. Pan Am Fam Clin 2006;1:10-15. Benítez del Rosario MA. Atención de la salud del anciano. En: Zurro M, Cano PJ eds.Atención Primaria. Conceptos, organización y práctica clínica. 5ª. Ed. Madrid:Elsevier. 2003. p.1642-1670.2. Citado en: Irigoyen Coria A, Morales López H. El anciano y su familia. En: Hamui Sutton A, Martínez Gallardo L. (eds.) The Family Physician and the Care of the Elderly. Pan Am Fam Clin 2006;1:10-15. Santos-Preciado I. Programa de salud del anciano y del adulto. En: De la Fuente JR,López-Bárcena J.(comp.). Federalismo y Salud en México. Primeros alcances de lareforma de 1995. 1ª. ed. México: Universidad Nacional Autónoma de México y Editorial Diana. 2001.p121-129.4. Citado en: Irigoyen Coria A, Morales López H. El anciano y su familia. En: Hamui Sutton A, Martínez Gallardo L. (eds.) The Family Physician and the Care of the Elderly. Pan Am Fam Clin 2006;1:10-15. García RE. Asistencia domiciliaria, la muerte en casa. Coordinación entre los distintos niveles asistenciales. En: Gómez-Sancho M. Cuidados paliativos e intervención psicosocial en enfermos terminales. Las Palmas de Gran Canaria: ICEPSS. 1994. p. 229-252.5. Citado en: Irigoyen Coria A, Morales López H. El anciano y su familia. En: Hamui Sutton A, Martínez Gallardo L. (eds.) The Family Physician and the Care of the Elderly. Pan Am Fam Clin 2006;1:10-15. Chacón RM, Grau AJ. La familia como parte del equipo: el cuidador principal. En:Gómez-Sancho M. Medicina paliativa en la cultura latina. Madrid: Ediciones Arán. 1999. p. 995-997. Citado en: Irigoyen Coria A, Morales López H. El anciano y su familia. En: Hamui Sutton A, Martínez Gallardo L. (eds.) The Family Physician and the Care of the Elderly. Pan Am Fam Clin 2006;1:10-15.

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Archivos en Artículo Editorial Vol.19 (3) 53- 56 Medicina Familiar ______________________________________________________________ 2017

La salud del paciente anciano: reto para la medicina familiar Health of the Elderly Patient: a Challenge for Family Medicine Arnulfo Irigoyen Coria,* Jessica Morales Prado, ** Yunuen Lucero Campos Moreira,** Pedro Edwin Olvera de la Rosa, ** Lourdes Thalía Uribe Nava. ** * Profesor Asociado C, Subdivisión de Medicina Familiar, División de Estudios de Posgrado, Facultad de Medicina, Universidad Nacional Autónoma de México. **Médico Residente de segundo año de la especialidad en medicina familiar. Instituto Mexicano del Seguro Social. Ciudad de México.

_______________________________________________________________________________

Datos empíricos demuestran que la pérdida de capacidad generalmente asociada con el envejecimiento solo se relaciona vagamente con la edad cronológica de una persona. No existe una persona mayor “típica”. La diversidad resultante en las capacidades y las necesidades de salud de las personas mayores no es aleatoria, sino que se basa en hechos ocurridos a lo largo del curso de la vida que a menudo pueden modificarse, lo que pone de manifiesto la importancia del enfoque del curso de la vida. Aunque a la larga la mayoría de las personas mayores experimentarán múltiples problemas de salud, la edad avanzada no implica dependencia. Además, contrariamente a lo que suele suponerse, el envejecimiento tiene mucha menos influencia en los gastos en atención de la salud que otros factores, como el alto costo de las nuevas tecnologías médicas. Margaret Chan 1

En el México de hoy, las personas adultas mayores se encuentran a punto de ingresar formalmente a la vejez; por el sólo hecho de que ya nacieron y debido a ello, el proceso del envejecimiento demográfico ya no es reversible. Las generaciones más numerosas en la población infantil son las reportadas de 1960 a 1980, y que naturalmente ingresarán al grupo de 60 años y más, a partir del 2020. Esto se verá reflejado con el incremento de ancianos en las próximas décadas. A partir de los 45 años de edad, la discapacidad se incrementa progresivamente alcanzando su cúspide a partir de los 70 años, cuando los riesgos de experimentar deterioro funcional son mayores. Es por ello, que al establecer líneas preventivas en los padecimientos más comunes -que aparecen en la vejezcoadyuvará a ganar años de vida saludable para aquellas personas de 60 años y más, para que la prevalencia de la discapacidad no tenga el mismo impacto que observamos actualmente. 2 Los ancianos tienen mucho que ofrecer a la sociedad: han acumulado sabiduría y experiencia. Si los mantenemos saludables, funcionales e independientes, podrían seguir favoreciendo a sus comunidades y a sus propias familias, pero lo más trascendente, es que podrían ser serán más felices. De ahí que se recomienden 12 actitudes que le permitan al adulto mayor ser un integrante respetado y valorado en todo momento en el marco de la familia 2: Actitud de comprensión hacia los miembros de la familia. Aceptar a cada uno con sus actitudes positivas y negativas. Mostrarse prudentes, discretos y con mucho tacto en su actuar con los miembros de la familia. Escuchar y hablar lo necesario, cuidar de no herir a su interlocutor. No dar consejos no solicitados. Ceder mucho, especialmente con los adolescentes y jóvenes, de manera que para ellos sea un agrado el venir a la casa de los abuelos. Mantener una buena comunicación de confianza y mucho diálogo. 3,4 53

Irigoyen Coria A. y cols.

Archivos en Medicina Familiar

Las enfermedades crónico degenerativas (ECD) afectan a todos los grupos de edad; por lo que se requiere prestar atención a este tipo de patologías, ya que existe mayor prevalencia en los grupos de edad más avanzada. Los adultos y ancianos son vulnerables a los factores de riesgo que favorecen las ECD, tales como ingerir alimentos contaminados, la inactividad física, la exposición al humo del tabaco o el uso nocivo del alcohol, entre muchas otras. La influencia de la sociedad puede expresarse de forma evidente en la urbanización explosiva y en los modos de vida poco saludables así como en el “explosivo” envejecimiento de la población. Por ello es indispensable que cada paciente sea consciente de su enfermedad y asuma responsablemente tanto el tratamiento fármacológico como el no farmacológico. De esta manera se contribuiría significativamente a evitar complicaciones a corto y largo plazo, mejorando la calidad de vida del paciente. 3,4 Las personas de la tercera edad se ven enfrentadas a muchas pérdidas.3,4 Algunas de las más significativas son:      

la presbicia disminución de las habilidades cognitivas como la memoria muerte de hermanos y otros familiares cercanos pérdida de la independencia al no poder valerse por sí mismos incorporación a la etapa de retiro jubilaciones y pensiones insuficientes

este deterioro en general afecta su pleno desarrollo y favorece un deficiente apego a los tratamientos, lo que condiciona complicaciones y una mala calidad de vida. Por lo tanto, resulta indispensable que el paciente cuente con una red de apoyo amplia, que le ayude y le apoye en la compresión de su enfermedad, la organización de sus medicamentos, y la modificación de los principales factores de riesgo. Para cada adulto mayor, la familia ocupa un lugar importante en su vida. Debido a las circunstancias propias de la tercera edad:   

se necesita una familia que los apoye familiares y personal del equipo de salud que les explique su enfermedad recibir una guía efectiva a lo largo de su padecimiento

para obtener así, los beneficios de un adecuado y efectivo acompañamiento. La familia es el primer y más importante recurso de apoyo para el anciano, en ella nació, a ella se dedicó; por lo que es de esperar que en la familia se desarrolle a plenitud su senectud. El apoyo emocional forma parte importante en la adaptación y superación de problemas de cualquier índole, la manera de lograrlo es: escucharlos, comprenderlos y brindarles la atención y el tiempo necesarios. La familia debería facilitar al anciano: descanso eficiente, empleo de su tiempo libre, realización de actividades cotidianas, en concordancia con sus limitaciones visuales, auditivas y motrices. La comprensión, tolerancia y sensibilidad dan la fortaleza necesaria para facilitar en el anciano una vida plena con dignidad.3,4

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Volumen 19 (3) julio-septiembre 2017

La salud del paciente anciano

Recomendaciones para el médico familiar y el cuidador El médico familiar debe tener especial cuidado en verificar que el cuidador tenga posibilidades reales de poder efectuar los cuidados esperados; por lo que debe cumplir con los requisitos de proximidad y condiciones físicas adecuadas. Que tenga un nivel aceptable de relación afectiva con el paciente; que el cuidador inspire seguridad y confianza; que cuente con la suficiente capacidad intelectual (no deficitaria) y suficiente nivel cultural; que tenga sentido de responsabilidad y goce de salud mental5,6. El médico familiar y su equipo de salud deberían verificar que el enfermo anciano se encuentre en una habitación cómoda y con poco ruido, sábanas sin arrugas, secas y limpias. Cuando se encuentre en cama que la cabeza se localice más elevada que el cuerpo. Que se hayan realizado los cuidados mínimos como:    

limpieza de la boca limpieza de la lengua y encías hidratación de los labios con vaselina detectar el sentido individual que tiene el “confort” para cada paciente5,6.

Y cuando se llegue a la etapa final, del enfermo anciano, podríamos ayudar a los pacientes y a sus familiares aumentando el número y duración de las visitas, intensificando los cuidados al enfermo, aplicando las medidas de urgencia en caso de hemorragias, vómito, agitación, etc.; evitando crisis de claudicación emocional en la familia. Pensar en la posibilidad de que aún cuando el enfermo se encuentre obnubilado o en coma, puede tener percepciones, razón por la que deberíamos ser muy cautos con los temas de conversación que abordemos delante de él. Resulta necesario comprender la necesidad de considerar a la familia como parte del equipo multidisciplinario -en el cuidado de estos enfermos-. La familia es quien más tiempo está con el enfermo y por lo tanto es la que debe llevar a cabo los cuidados de la manera más integral posible, al realizar el baño, la alimentación, la administración de medicamentos, el apoyo, el contacto físico, etc. Las relaciones satisfactorias: paciente-familiares y médico familiar-paciente-familia requieren de paciencia, compromiso y aceptación. Si no se toman en consideración estos factores la relación médico-paciente podría convertirse en una peligrosa fuente de estrés y frustración anulando la posibilidad de realizar una ayuda efectiva al anciano enfermo. Los médicos familiares -en colaboración con el equipo de saludsomos los encargados de entrenar a los cuidadores de los pacientes, lo cual debería incluir el conocimiento de las patologías que padecen los propios ancianos. Pero no solo eso, somos los responsables de vigilar de igual manera la salud del cuidador y de poner el máximo empeño para evitar que caiga en el desgaste tanto físico como emocional. 6-10

Referencias 1. 2.

3.

Chan M. Prólogo. Biblioteca de la OMS: Informe mundial sobre el envejecimiento y la salud. 2015. Disponible en: http://apps.who.int/iris/bitstream/10665/186466/1/9789240694873_spa.pdf?ua=1&ua=1 Secretaría de Salud. Atención del Envejecimiento 2013-2018. México. Disponible en: http://www.cenaprece.salud.gob.mx/descargas/pdf/PAE_AtencionEnvejecimiento2013_2018.pdf Placeres Hernández JF, de León Rosales L, Delgado Hernández I. La familia y el adulto mayor. Rev. Med. Electrón. [Internet]. 2011; 33( 4 ): 472-483. Disponible en: http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1684-18242011000400010&lng=es.

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Irigoyen Coria A. y cols.

4.

Archivos en Medicina Familiar

Relaciones familiares y sentimentales del adulto mayor Disponible en: http://www.elhospitalblog.com/vida_sana/cuidados-del-adulto-mayor/relaciones-familiares-y-sentimentales-deladulto-mayor/ 5. El anciano dentro de la familia. Disponible en: http://news.eduvirama.com/el-anciano-dentro-de-la-familia/ 6. Irigoyen Coria A, Morales López H. El anciano y su familia. En: Hamui Sutton A, Martínez Gallardo L. (eds.) The Family Physician and the Care of the Elderly. Pan Am Fam Clin 2006;1:10-15. 7. Benítez del Rosario MA. Atención de la salud del anciano. En: Zurro M, Cano PJ eds.Atención Primaria. Conceptos, organización y práctica clínica. 5ª. Ed. Madrid:Elsevier. 2003. p.1642-1670.2. Citado en: Irigoyen Coria A, Morales López H. El anciano y su familia. En: Hamui Sutton A, Martínez Gallardo L. (eds.) The Family Physician and the Care of the Elderly. Pan Am Fam Clin 2006;1:10-15. 8. Santos-Preciado I. Programa de salud del anciano y del adulto. En: De la Fuente JR,López-Bárcena J.(comp.). Federalismo y Salud en México. Primeros alcances de lareforma de 1995. 1ª. ed. México: Universidad Nacional Autónoma de México y Editorial Diana. 2001.p- 121-129.4. Citado en: Irigoyen Coria A, Morales López H. El anciano y su familia. En: Hamui Sutton A, Martínez Gallardo L. (eds.) The Family Physician and the Care of the Elderly. Pan Am Fam Clin 2006;1:10-15. 9. García RE. Asistencia domiciliaria, la muerte en casa. Coordinación entre los distintos niveles asistenciales. En: Gómez-Sancho M. Cuidados paliativos e intervención psicosocial en enfermos terminales. Las Palmas de Gran Canaria: ICEPSS. 1994. p. 229-252.5. Citado en: Irigoyen Coria A, Morales López H. El anciano y su familia. En: Hamui Sutton A, Martínez Gallardo L. (eds.) The Family Physician and the Care of the Elderly. Pan Am Fam Clin 2006;1:10-15. 10. Chacón RM, Grau AJ. La familia como parte del equipo: el cuidador principal. En: Gómez-Sancho M. Medicina paliativa en la cultura latina. Madrid: Ediciones Arán. 1999. p. 995-997. Citado en: Irigoyen Coria A, Morales López H. El anciano y su familia. En: Hamui Sutton A, Martínez Gallardo L. (eds.) The Family Physician and the Care of the Elderly. Pan Am Fam Clin 2006;1:10-15.

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1405-8871

Órgano de difusión científica de la Subdivisión de Medicina Familiar División de Estudios de Posgrado, Facultad de Medicina, Universidad Nacional Autónoma de México Aten. Fam. Volumen 24 no. 4 octubre-diciembre, 2017

Artículos originales • Valoración de la capacidad funcional en ancianos mayores de 70 años con la escala Short Physical Performance Battery

• Autorregulación de hábitos alimenticios en médicos residentes de Medicina Familiar con sobrepeso u obesidad

• Análisis de factores de riesgo cardiovascular: indicadores de calidad intrahospitalaria en ictus isquémico agudo

• Efecto de una intervención socioeducativa en mujeres víctimas de violencia intrafamiliar en una unidad de medicina familiar de Ciudad Obregón, Sonora, México

• Asociación del índice de desarrollo humano y diabetes mellitus tipo 2 en unidades de medicina familiar del estado San Luis Potosí, México

• Apoyo social a mujeres con cáncer de mama en una unidad de medicina familiar de la Ciudad de México

www.fmposgrado.unam.mx ■ www.revistas.unam.mx Registrada en: latindex, www.latindex.org periódica, www.dgbiblio.unam.mx ■ iresie, www.iisue.unam.mx/iresie Biblioteca cgt-ibt-unam, biblioteca.ibt.unam.mx ■ Medigraphic, www.medigraphic.com Elsevier, www.journals.elsevier.com/atencion-familiar/ ■ ScienceDirect, www.sciencedirect.com/

Universidad Nacional Autónoma de México

Atención Familiar

Dr. Enrique Luis Graue Wiechers Rector

Dr. Juan José Mazón Ramírez Fundador

Facultad de Medicina

Dr. Geovani López Ortiz Editor responsable

Dr. Germán Enrique Fajardo Dolci Director Dra. Irene Durante Montiel Secretaria general Dr. José Halabe Cherem Jefe de la División de Estudios de Posgrado

Mtra. Lilia Aurora Arévalo Ramírez Editora técnica Dr. Arnulfo Irigoyen Coria Dr. Raúl Ariza Andraca Coeditores David Cortés Álvarez Diseñador

Dra. Rosalinda Guevara Guzmán Jefa de la División de Investigación

dg

Dra. María de los Ángeles Fernández Altuna Secretaria de Servicios Escolares

Laura M. Hernández Alvarado Asistente editorial

Dra. Alicia Hamui Sutton Secretaria de Educación Médica

Comité Editorial Dra. Verónica Casado Vicente (España) Dr. Javier Domínguez del Olmo (México) Dr. Carlo Alberto Frati Munari (México) Dr. Pablo González Blasco (Brasil) Dr. Carlos Roberto Jaen (Estados Unidos) Dr. Javier Santacruz Varela (México) Dr. José Saura Llamas (España)

Dr. Alberto Lifshitz Guinzberg Secretario de Enseñanza Clínica e Internado Médico

División de Estudios de Posgrado Dr. José Halabe Cherem Jefe de la División Dr. Rogelio Chavolla Magaña Secretario académico Dr. Julio Cacho Salazar Jefe de la Subdivisión de Graduados y Educación Continua

Traducción y corrección de estilo en inglés Lic. Patricia A. Arévalo Ramírez Traducción y corrección de estilo en portugués Dr. Pablo González Blasco

Atención Familiar Se distribuye en su domicilio mediante suscripción anual (cuatro números). Si desea suscribirse mande correo electrónico a: [email protected] para enviarle ficha de depósito con referencia; posteriormente envíe sus datos completos y copia de depósito bancario (ambos lados). Datos: Nombre, calle y número exterior e interior, colonia, código postal, ciudad, estado Teléfono particular, celular, y de trabajo Correo electrónico y especialidad Costo: $ 400.00 nacional $35.00 us dl extranjeros Recuerde que en los criterios para la recertificación en Medicina Familiar se valora la suscripción a revistas relacionadas con la materia como un punto al año. Informes: (01 55) 56 23 72 74 [email protected]

Dr. Gerhard Heinze Martin Jefe de la Subdivisión de Especializaciones Médicas Dr. Juan José Mazón Ramírez Jefe de la Subdivisión de Medicina Familiar

Atención Familiar vol. 24, no. 4, octubre-diciembre de 2017, trimestral. Editada por la Universidad Nacional Autónoma de México, Ciudad Universitaria, delegación Coyoacán, cp 04510, Ciudad de México, a través de la División de Estudios de Posgrado de la Facultad de Medicina, Unidad de Posgrado, edificio G, segundo nivel, Circuito de Posgrados, Centro Cultural Universitario, Ciudad Universitaria, delegación Coyoacán, cp 04510, Ciudad de México, tel: 01(55) 56 23 72 74, [email protected]. Editor responsable: Dr. Geovani López Ortiz. Número de certificado de reserva de derechos al uso exclusivo del título: 04-2003-121914243800-203, issn digital en trámite. Responsable de la última actualización de este número: Mtra. Lilia A. Arévalo Ramírez, Ciudad Universitaria, delegación Coyoacán, Ciudad de México, cp 04510. Fecha de última modificación: 6 de octubre de 2017, www.fmposgrado.unam.mx, www.revistas.unam.mx. Los artículos contenidos en esta publicación pueden reproducirse citando la fuente. Las opiniones expresadas en los artículos firmados que se publican en Atención Familiar son responsabilidad de sus autores. “El Comité Editorial se reserva el derecho de realizar las adecuaciones pertinentes a los artículos.”

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Órgano de difusión científica de la Subdivisión de Medicina Familiar División de Estudios de Posgrado, Facultad de Medicina, unam Aten. Fam. Volumen 24 no. 4 octubre-diciembre, 2017 www.fmposgrado.unam.mx www.revistas.unam.mx

Contenido

Editorial

143 • Diabetes mellitus: el reto futuro en el presente Carlos A. Rivero-López, Kweilan Yap-Campos

Artículos originales

145 • Valoración de la capacidad funcional en ancianos mayores de 70 años con la escala Short Physical Performance Battery Félix Martínez-Monje, Jhon Mauricio Cortés-Gálvez,Yamil Cartagena-Pérez, Carmen Alfonso-Cano, María Isabel Sánchez-López, Mariano Leal-Hernández

150 • Análisis de factores de riesgo cardiovascular: indicadores de calidad intrahospitalaria en ictus isquémico agudo Begoña Palazón-Cabanes, Purificación Gómez-Jara, Eduardo José Martínez-Lerma, Ana Morales-Ortiz, Mariano Leal-Hernández, José Abellán-Alemán

156 • Asociación del índice de desarrollo humano y diabetes mellitus tipo 2 en unidades de medicina familiar del estado San Luis Potosí, México Miguel Ángel Mendoza-Romo, Gad Gamed Zavala-Cruz, Aldanely Padrón-Salas, Francisco Javier Ortiz-Nesme, María Cleofás Ramírez-Arriola, José Antonio Salas-Jiménez

160 • Autorregulación de hábitos alimenticios en médicos residentes de Medicina Familiar con sobrepeso u obesidad Alejandra Janeth Argüello-González, Gilberto Cruz-Arteaga

165 • Efecto de una intervención socioeducativa en mujeres víctimas de violencia intrafamiliar en una unidad de medicina familiar de Ciudad Obregón, Sonora, México Celina Barreras-Gil,Víctor H. Salazar-Ruiz

169 • Apoyo social a mujeres con cáncer de mama en una unidad de medicina familiar de la Ciudad de México Esther Azcárate-García, Uziel Valle-Matildes, Rodrigo Villaseñor-Hidalgo, Abraham Isayd Gómez-Pérez

Casos clínicos

173 • Hipercalcemia como causa de hipertensión arterial: presentación de un caso

Carlos Harrison-Gómez, Derek Harrison-Ragle, Francisco Sánchez-Lezama, Adalberto Arceo-Navarro, Víctor Manuel Arredondo-Arzola, Luis Gerardo Domínguez-Carrillo

176 • Enfermedad de Gaucher: estudio de caso César Lucio-García, Lorena Noriega-Salas

Identifique el caso 179 • Carcinoma

Wendy Lea Chacón-Pizano

Índices

181 • Índice analítico

182 • Índice de autores

183 • Índice por temas

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Scientific Journal of the Family Medicine Corpo de divulgação científica de medicina familiar División de Estudios de Posgrado, Facultad de Medicina, unam Aten. Fam. Volume 24 no. 4 october-december, 2017 Aten. Fam. Volume 24 no. 4 outubro-dezembro, 2017

Editorial/Editorial

Content / Conteúdo

143 • Diabetes Mellitus: The Challenge Future in the Present • Diabetes mellitus: o futuro desafio no presente Carlos A. Rivero-López, Kweilan Yap-Campos

Original Articles/Artigos originais

aten fam

2017;24(4)

145 • Assessment with Short Physical Performance Battery Scale of Functional Ability in the Elderly over 70 years

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• Avaliação da capacidade funcional em idosos com mais de 70 anos com a Escala Short Physical Performance Battery Félix Martínez-Monje, Jhon Mauricio Cortés-Gálvez,Yamil Cartagena-Pérez, Carmen Alfonso-Cano, María Isabel Sánchez-López, Mariano Leal-Hernández • Analysis of Cardiovascular Risk Factors: Indicators of Hospital Quality in Acute Ischemic Ictus • Análise dos fatores de risco cardiovascular: indicadores de qualidade hospitalar no acidente vascular cerebral isquêmico agudo Begoña Palazón-Cabanes, Purificación Gómez-Jara, Eduardo José Martínez-Lerma, Ana Morales-Ortiz, Mariano Leal-Hernández, José Abellán-Alemán • Human Development Index Association and Diabetes Mellitus Type 2 in Family Medicine Units in the state of San Luis Potosí, México • Associação do índice de desenvolvimento humano e diabetes mellitus tipo 2 em unidades de medicina familiar no estado de San Luis Potosí, México Miguel Ángel Mendoza-Romo, Gad Gamed Zavala-Cruz, Aldanely Padrón-Salas, Francisco Javier Ortiz-Nesme, María Cleofás Ramírez-Arriola, José Antonio Salas-Jiménez • Self-regulation of Dietary Habits in Family Medicine Residents with Overweight or Obesity • Auto-regulação de hábitos alimentares em residentes médicos de Medicina Familiar com excesso de peso ou obesidade Alejandra Janeth Argüello-González, Gilberto Cruz-Arteaga • Effect of a Socio-Educational Intervention in Women Victims of Domestic Violence in a Family Medicine Unit in Ciudad Obregon, Sonora, Mexico • Efeito da intervenção socioeducativa sobre mulheres vítimas de violência doméstica em uma unidade de medicina familiar em Ciudad Obregón, Sonora, México Celina Barreras-Gil,Víctor H. Salazar-Ruiz • Social Support to Women with Breast Cancer in a Family Medicine Unit in Mexico City • Apoio social para mulheres com câncer de mama em uma unidade de medicina familiar na Cidade do México Esther Azcárate-García, Uziel Valle-Matildes, Rodrigo Villaseñor-Hidalgo, Abraham Isayd Gómez-Pérez

Clinical cases/ Casos clínicos

173 • Hypercalcemia as a Cause of High Blood Pressure: Case Report

• Hipercalcemia como causa da hipertensão arterial: apresentação de um caso Carlos Harrison-Gómez, Derek Harrison-Ragle, Francisco Sánchez-Lezama, Adalberto Arceo-Navarro, Víctor Manuel Arredondo-Arzola, Luis Gerardo Domínguez-Carrillo 176 • Gaucher disease: a case study • Doença de Gaucher: estudo de caso César Lucio-García, Lorena Noriega-Salas

Identify a case/Identifique el caso 179 • Carcinoma

• Carcinoma Wendy Lea Chacón-Pizano

Indexes/Índices

181 • Analytical Index 182 • Author Index 183 • Index per subjects • Índice analítico

• Índice de autores IV

• Índice por assunto

Editorial Diabetes mellitus: el reto futuro en el presente Diabetes Mellitus:The Challenge Future in the Present Diabetes mellitus: o futuro desafio no presente Carlos A. Rivero-López,* Kweilan Yap-Campos*

aten fam

En la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) de medio camino se encontró que la prevalencia de diabetes en el país pasó de 9.2% en 2012 a 9.4% en 2016, en esta población hay más mujeres diabéticas (10.3%) que hombres (8.4%). Esta tendencia se observa tanto en localidades urbanas (10.5% en mujeres y 8.2% en hombres) como en rurales (9.5% en mujeres, 8.9% en hombres).2 De los adultos ya diagnosticados con diabetes mellitus 87% recibe tratamiento de control; el uso de insulina aumentó de 6.5% a 11.1% y el uso combinado con otros antidiabéticos también tuvo un incremento significativo. La misma encuesta menciona que a dos de cada 10 adultos con diabetes se les realizó revisión de pies, a pesar que el pie diabético es la primera causa de amputación de miembros inferiores y su revisión es recomendada para todos los pacientes. Otro dato abrumador es que la medición de la hemoglobina glicosilada se realizó únicamente a 15.2% de los pacientes con diabetes mellitus tipo 2 encuestados y 46.4% no llevaba a cabo ninguna medida preventiva para retrasar o evitar complicaciones. Estos datos dados a conocer por Ensanut, son una pequeña muestra de la amplitud del problema de

Sugerencia de citación: Rivero-López CA, Yap-Campos K. Diabetes mellitus: el reto futuro en el presente. Aten Fam. 2017;24(4):143-144.

143

2017;24(4)

La diabetes mellitus es una enfermedad crónica que actualmente afecta a millones de mexicanos, de no implementarse estrategias de prevención, en un futuro próximo será la principal causa de muerte en el país. México está entre los primeros lugares en el mundo en cuanto a índices de obesidad y sobrepeso, siete de cada 10 adultos tienen sobrepeso y uno de cada tres niños y jóvenes lo padecen, este es un problema grave que posiciona a México en el primer lugar en prevalencia de obesidad y sobrepeso en América Latina,1 sumado a los casos de diabetes, este problema genera altos índices de mortalidad, discapacidad y afectación a la economía de las familias y de las instituciones de salud. Recientemente el doctor José Narro Robles, secretario de Salud, manifestó: “estamos ya desarrollando los problemas del futuro desde nuestra niñez… parte del problema es que casi una tercera parte de las personas que tiene diabetes no lo sabe.”2

*

Coordinación de evaluación, Subdivisión de Medicina Familiar, División de Estudios de Posgrado, Facultad de Medicina, Universidad Nacional Autónoma de México (unam).

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2017;24(4)

Rivero-López CA y col.

diabetes mellitus en el país, la cual se ha convertido en una verdadera pandemia, también llamada “tsunami de la salud”, en la cual mucho influyen los hábitos y costumbres actuales, que propician poblaciones sedentarias, con malos hábitos dietéticos, que aumentan de peso en forma constante debido a una alimentación basada en carbohidratos simples. El incremento de este padecimiento ha provocado que la investigación científica médica, haya generado un mayor conocimiento de la fisiopatología de la diabetes mellitus, como es la propuesta del doctor DeFronzo,3 quien establece que hemos pasado del triunvirato al octeto ominoso, especificando que la alteración metabólica no solo es la deficiencia de la célula beta sino también la actividad anormal de la célula alfa, al secretar mayor cantidad de glucagón, la participación cerebral a través de diferentes neurotransmisores, la resistencia periférica a la insulina y muy destacadamente la secreción de glucosa por la vía de la gluconeogénesis hepática, lo que ha permitido desarrollar fármacos para cada uno de estos procesos que dan origen a la diabetes mellitus;4 por lo tanto, hoy se cuenta con secretagogos de insulina, glitazonas, metforminas, inhibidores de la dpp4, inhibidores de la sglt2, análogos del glp1 y una gran variedad de insulinas, que brindan mejores alternativas para diseñar una mejor terapéutica con los pacientes y así lograr que las metas de control recomendadas por las diferentes guías internacionales y locales puedan ser cumplidas.5

Sin embargo, a pesar de contar con un arsenal terapéutico más amplio de medicamentos, tanto orales como inyectables, en México se está lejos de los controles óptimos en estos pacientes; se ha publicado que menos de 35% de la población diagnosticada y con tratamiento está dentro de los niveles recomendados;6 por esto, es imperativo revisar con mayor detenimiento las causas de esta falta de control y de apego al tratamiento. Esta situación es alarmante dado que, de no modificar los planes terapéuticos de manera rápida e intensa, así como proveer a los médicos familiares en las instituciones de salud de los exámenes de laboratorio apropiados y medicamentos suficientes para realizar esta labor de manera adecuada, se está supeditado a que las complicaciones tanto micro (nefropatía, retinopatía y neuropatía periférica) como macrovasculares (infarto agudo de miocardio, accidentes cerebrales vasculares e insuficiencia arterial periférica) aumenten en frecuencia y se presenten a edades más tempranas, aunado a la inevitable elevación de las cifras de morbi-mortalidad de nuestro país. El médico familiar es el responsable protagónico en la prevención primaria, secundaria y terciaria de este padecimiento, es su intervención integral la que se verá reflejada en la calidad de vida de los pacientes y por su puesto en ir modificando estas cifras de morbimortalidad tan elevada. Los especialistas en Medicina Familiar deben estar capacitados y calificados para realizar diagnósticos tempranos, controles terapéuticos ade-

144

cuados, así como en prevenir y retardar en lo posible las complicaciones micro y macrovasculares, para de esta manera ofrecer una calidad de vida mejor a sus pacientes y sus familias. Un médico familiar conoce la etiología social, la psicología del padecimiento y las diferentes opciones terapéuticas, por esta razón, al ser los médicos con mayor protagonismo en el sector salud, en el que se revisan y tratan la mayoría de estos pacientes diabéticos, se les exhorta a que tengan una conducta permanente de estudio, actualizándose e involucrándose en esta enfermedad para reducir el peso económico que representa la diabetes mellitus en México y ayudar a resolver este gran problema de salud pública. Referencias

1. Cifras de Sobrepeso y Obesidad en México-Ensanut mc 2016 [Internet] [citado 2017 abril 4]. Disponible en: http://oment.uanl.mx/cifras-de-sobrepeso-y-obesidad-en-mexico-ensanut-mc-2016/ 2. La diabetes, una epidemia que arrasa un México sin hábitos alimentarios sanos [citado 2017 abril 4]. Disponible en: http://www.efe.com/efe/ america/mexico/la-diabetes-una-epidemia-quearrasa-un-mexico-sin-habitos-alimentarios-sanos/50000545-3097339 3. DeFronzo RA. From the triumvirate to the ominous octet. Diabetes. 2009;58(4):773-95. 4. ukpds 33 study group. Intensive blood-glucose control with sulphonylureas or insulin compared with conventional treatment and risk of complications in patients with type 2 diabetes Prospective Diabetes Study (ukpds) Group. Lancet. 1998;352:837-53. 5. Clinical Guidelines Task Force. Global Guideline for Type 2 Diabetes. idf [Internet]. 2012; [citado 2017 abril 2]. Disponible en: www.idf.org 6. Saydah SH, Fradkin J, Cowie CC, et al. Poor control of risk factors for vascular disease among adults with previously diagnosed. Diabetes. jama. 2004;291(3):335-42.

Artículo original Valoración de la capacidad funcional en ancianos mayores de 70 años con la escala Short Physical Performance Battery Assessment with Short Physical Performance Battery Scale of Functional Ability in the Elderly over 70 years Avaliação da capacidade funcional em idosos com mais de 70 anos com a Escala Short Physical Performance Battery Félix Martínez-Monje,* Jhon Mauricio Cortés-Gálvez,* Yamil Cartagena-Pérez,* Carmen Alfonso-Cano,* María Isabel Sánchez-López,* Mariano Leal-Hernández*

aten fam

D, calcio o albúmina no se correlacionaron con la puntuación del cuestionario sppb. Conclusiones: el porcentaje de pacientes prefrágiles por encima de 70 años fue muy alto. Se propone la utilización de la velocidad de la marcha (1.9 ±0.5 min) para aquellos médicos que tengan saturación de pacientes, ya que presentó la relación lineal directa más fuerte con la realización completa del cuestionario sppb. Summary Objective: to assess, according to the Short Physicial Performance Battery Scale (sppb), the functional ability of the elderly over 70 years, to detect early functional disability/ pre-delicacy and to analyze the relationship between the score of the questionnaire and the levels of albumin, calcium and vitamin D. Methods: descriptive, cross-sectional study that included 77 patients over the age of 70 who attended consultation with their Family physician for different reasons. It was applied the sppb scale to measure calcium, albumin, and vitamin D values. Pre-delicacy was considered when the obtained score of the sppb was less

2017;24(4)

Resumen Objetivos: valorar la capacidad funcional de las personas mayores de 70 años según la escala Short Physical Performance Battery (sppb), para detectar incapacidad funcional precoz/prefragilidad y analizar la relación entre la puntuación del cuestionario y los niveles de calcio, albúmina y vitamina D. Métodos: estudio descriptivo transversal que incluyó a 77 pacientes mayores de 70 años que acudieron a consulta con su médico familiar por diversos motivos. Se les aplicó la escala sppb y se midieron valores de calcio, albúmina y vitamina D. Se consideró prefragilidad cuando la puntuación obtenida del spbb fue menor a 10. Resultados: la puntuación global del cuestionario fue de 7.75 ±2.72 puntos, lo cual colocó a 67.5% de los pacientes en prefragilidad. Se determinó una correlación entre la puntuación global y la puntuación por secciones; la velocidad al andar cuatro metros fue la sección con el mayor coeficiente de correlación con la puntuación total. Los niveles de vitamina

Palabras clave: valoración, anciano, atención primaria Key words: assessment, elderly, primary care Palavras-chave: avaliação, idosos, atenção primária Recibido: 25/5/17 Aceptado: 29/8/17 Médicos de Familia, Centro de Salud Docente de San Andrés, Murcia, España

*

Sugerencia de citación: Martínez-Monje F, Cortés-Gálvez JM, Cartagena-Pérez Y, Alfonso-Cano C, Sánchez-López MI, Leal-Hernández M. Valoración de la capacidad funcional en ancianos mayores de 70 años con la escala Short Physical Performance Battery. Aten Fam. 2017;24(4):145-149.

145

Correspondencia: Mariano Leal-Hernández [email protected]

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2017;24(4)

Martínez-Monje F y cols.

than 10. Results: the overall score of the questionnaire was 7.75 ±2.72 points, which placed the 67.5% of the patients in pre-delicacy. A correlation between the overall score and the score was determined by sections; four meters walking speed was the one with the highest coefficient of correlation with the total score. Vitamin D, calcium and albumin levels were not correlated with the sppb questionnaire score. Conclusions: the percentage of pre-delicacy patients over 70 years was very high. It is proposed the use of the walking speed (1.9 ±0.5 min) for those physicians who have patients’ saturation, since it presented the strongest direct linear relationship with the complete realization of the sppb questionnaire. Resumo Objetivos: avaliar a capacidade funcional de pessoas com mais de 70 anos de acordo com a escala Short Physical Performance Battery (sppb), detectar deficiência funcional/prefragilidade inicial e analisar a relação entre a pontuação do questionário e os níveis de cálcio, albumina e vitamina D. Métodos: estudo descritivo transversal que envolveu 77 pacientes com mais de 70 anos de idade que visitaram seu médico de família por vários motivos. A escala sppb foi aplicada e os valores de cálcio, albumina e vitamina D foram medidos. O pré-fragilismo foi considerado quando o escore spbb foi inferior a 10. Resultados: a pontuação geral do questionário foi de 7.75 ±2.72 pontos, o que colocou 67.5% dos pacientes em prefragilidade. Observou-se uma correlação entre o escore geral e a pontuação por seções; a velocidade de andar quatro metros era a secção com o maior coeficiente de correlação

com a pontuação total. Os níveis de vitamina D, cálcio ou albumina não foram correlacionados com o escore do questionário sppb. Conclusões: a porcentagem de pacientes pré-frágeis com mais de 70 anos de idade foi muito alta. O uso da velocidade da marcha (1.9 ±0.5 min) é proposto para os médicos com saturação de pacientes, pois apresentou a relação direta direta mais forte com a realização completa do questionário sppb. Introducción La valoración de la esfera funcional en pacientes geriátricos permite diseñar tratamientos integrales y planes de cuidados adaptados a las condiciones individuales de los pacientes ancianos. Hoy en día, se utilizan escalas con el objetivo de conocer la situación basal del paciente, determinar el impacto de la enfermedad actual y obtener información objetiva, así como establecer tratamientos específicos y valorar la respuesta a los mismos.1-3 Por función se entiende la capacidad autónoma de ejecutar acciones que componen el quehacer individual y social diario. El deterioro funcional es predictor de mala evolución clínica y de mortalidad en pacientes mayores, independientemente de su diagnóstico. Las medidas del estado funcional más utilizadas son los cuestionarios de actividades básicas de la vida diaria (abvd) y de actividades instrumentales de la vida diaria (aivd). Estas medidas, especialmente las abvd, tienen la desventaja de que solo permiten identificar a las personas con los grados más graves de discapacidad y en el caso de las aivd, algunas actividades están influidas por el sexo y la cultura.4,5 A partir de los 80 años, se incluyen las medidas objetivas de desempeño

146

físico, que permiten clasificar el nivel de funcionamiento físico de las personas a lo largo de todo el espectro funcional.6 Una de las medidas más empleadas en investigación es la escala Short Physical Performance Battery (sppb), que consta de tres cuestionarios: equilibrio, velocidad de la marcha y levantarse y sentarse en una silla cinco veces.7 Estudios epidemiológicos longitudinales han mostrado su capacidad para predecir dependencia, institucionalización, hospitalización y mortalidad.8-10 Debido a lo antes expuesto, el objetivo del presente trabajo fue valorar la capacidad funcional de las personas mayores de 70 años según la escala sppb, para detectar incapacidad funcional precoz/prefragilidad y analizar la relación entre la puntuación del cuestionario sppb y los niveles de calcio, albúmina y vitamina D. Métodos Estudio descriptivo transversal realizado en el Centro de Salud de San Andrés, Murcia, España, el cual atiende a una población de 3 422 pacientes mayores de 70 años. El estudio se realizó durante los meses de noviembre de 2015 a febrero de 2016 y fue aprobado por el comité de ética del Hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia. Se incluyeron a los dos primeros pacientes mayores de 70 años citados en la lista de pacientes de cada día, que acudieron a la consulta de su médico de familia sin importar el motivo. Se excluyeron pacientes con patología traumatológica, reumatológica, neurológica o cardiovascular avanzada en la que el sspb no podía aplicarse. El total de pacientes analizados fue 77. Previo consentimiento informado se aplicó la escala sppb, la cual va de

Capacidad funcional en ancianos

mujer. El tiempo medio para la realización del cuestionario fue de 6.7 ±2 minutos, (2.8 ±1 minutos para el cuestionario de ejecución en el que se mide el equilibrio, 1.9 ±0.5 minutos para velocidad de marcha y 2.0 ±0.5 minutos para la fuerza). La puntuación global del cuestionario sppb fue de 7.75 ±2.72 puntos sobre un máximo alcanzable de 12. Las puntuaciones de las diferentes partes del cuestionario aparecen desglosadas en la tabla 1. En la tabla 2 aparece la puntuación del cuestio-

Tabla 1. Puntuación cuestionario sppb (n=77) Media (de) Equilibrio total (0-4):

3 (±0.99)

Pies juntos (0-1)

0.97 (±0.16)

½ Tandem (0-1)

0.91 (±0.29)

Tandem (0-2)

1.12 (±0.78)

Velocidad al andar 4 m (0-4)

2.58 (±1.07)

Fuerza silla 5 veces (0-4)

2.08 (±1.32)

Total (0-12)

7.75 (±2.72)

Edad

Puntuación total sppb (0-12)

70-75 años (n=28)

8.71 (±2.53)

76-80 años (n=28)

8.11 (±2.41)

>80 años (n=21) Sexo

6.37 (±2.73) Puntuación total sppb (0-12)

Varones (n=24)

7.8 (±3.14)

Mujeres (n=53)

7.65 (±2.55)

Tabla 3. Correlación entre las partes del cuestionario sppb y su puntuación Coef. correlación Pearson

Resultados La media de edad fue 79.19 ±2.48 años; 36.4% (28) de los pacientes tenía entre 70 y 75 años, el mismo porcentaje se encontró en aquellos entre 76 y 80 años, mientras que 27.2% (21) tenía más de 80 años. De los 77 pacientes analizados 31.2% (24) era varón y 68.8% (53)

147

p

Equilibrio total:

0.72

ilovepdf_merged (1) productividad cientifica gpo y residentes

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