FOLLETO - De la buena persona

3 Pages • 2,509 Words • PDF • 267.3 KB
Uploaded at 2021-09-24 15:11

This document was submitted by our user and they confirm that they have the consent to share it. Assuming that you are writer or own the copyright of this document, report to us by using this DMCA report button.


¿Qué pasaría contigo si murieras el día de hoy?

¿A dónde irías? ¿Crees ser una buena persona para ir al cielo? Responde estás preguntas sinceramente: 1. ¿Siempre has tenido a Dios en cuenta por encima de todo? - Muchos sólo buscan a Dios en momentos difíciles. Pero en la Biblia, Dios dijo: “No debes tener otros dioses aparte de mí" (Éxodo 20:3). Si has considerado que lo más importante en tu vida es el dinero, otra(s) persona(s), o tu mismo(a), haz hecho que eso tome el lugar de Dios. 2. ¿Alguna vez haz honrado imágenes religiosas o estatuas? ¿Te has inclinado ante ellas? - En la Biblia, Dios prohibió estrictamente hacer toda clase de ídolos, imágenes talladas o estatuas fundidas y advirtió que no debemos levantar pilares sagrados para honrarlas, ni tampoco inclinarnos ante ellas (Éx.20:4; Dt. 4:15-16; Lev. 26:1; Hechos 17:28-30). 3. ¿Alguna vez haz usado ‘el nombre de Dios’ en forma de burla, juramento, para maldecir o para hacer algo malo? En la Biblia, Dios dijo que “No debes tomar el nombre del SEÑOR tu Dios en vano, porque el SEÑOR no tendrá por inocente al que tome su nombre en vano" (Éxodo 20:7).

7. ¿Alguna vez has fornicado? Éxodo 20:14 dice que "No debes cometer adulterio" (o engañar a tu cónyuge). Pero Jesús dijo que aquél que mira a una persona para codiciar o desear su cuerpo, ya adulteró en su corazón (Mateo 5:8). ¿Has hecho esto, o visto pornografía? ¿Has fornicado por tener relaciones fuera del matrimonio? (1 Corintios 7:4). 8. ¿Alguna vez has robado algo? - La Biblia dice en Éxodo 20:15 que “No debes hurtar”. ¿Haz robado, aunque sea algo pequeño? ¿Has comprado piratería? ¿Has tomado algo ‘prestado’ que nunca devolviste? ¿Has tomado el crédito de algo que le pertenecía a alguien más? 9. ¿Cuántas mentiras has dicho en tu vida? - Éxodo 20:9 dice que "No debes hablar falso testimonio hacia tu prójimo". ¿Cuántas veces has mentido o inventado excusas para justificarte a ti mismo? ¿Le has hecho creer a otros algo que no era verdad? 10. ¿Alguna vez haz sentido envidia de lo que otros tienen? Éxodo 20:17 dice: "No debes codiciar… nada que sea de tu prójimo". ¿Te has sentido enojado contra otro por querer tener la riqueza, el poder, la belleza o alguna posesión que tú no tienes? Si haz respondido que ‘sí’ a alguna de estas preguntas,

¿Sabes que habrá un Juicio de Dios?

Puesto que Dios es bueno, tal vez pienses que pasará por alto tus pecados. Sin embargo, precisamente porque Dios es bueno y es un Juez Justo (Salmos 7:11), Él pagará a todos “conforme a sus obras” (Mateo 16:27). Y Jesús dijo que “los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida; pero los que hicieron lo malo, a resurrección de condenación” (Juan 5:29). “El viene a juzgar la tierra: juzgará al mundo con justicia y a los pueblos con su fidelidad” (Salmos 96:13). Él “juzgará todos los secretos de los hombres” (Romanos 2:16) y “traerá toda obra a juicio, junto con todo lo oculto, sea bueno o sea malo” (Eclesiastés 12:14), y “toda palabra vana que hablen los hombres” (Mateo 12:36). “…Sacará a la luz todas las cosas ocultas… y también pondrá de manifiesto los designios de los corazones” (1 Corintios 4:5). “Pues no hay nada oculto que no haya de ser manifiesto, ni secreto que no haya de ser conocido y salga a la luz” (Lucas 8:17) La Biblia dice que aquellos que no conocieron a Dios y desobedecieron su mensaje, serán castigados “con eterna perdición”, excluidos para siempre de Su presencia (2 Tesalonicenses 1:7-9). Y en el Juicio, Él "enviará a sus ángeles, y recogerán de su reino a todos los que son piedra de tropiezo y a los que hacen maldad; y los echarán en el horno de fuego..." (Mateo 13:41).

La Biblia describe al infierno…

5. ¿Alguna vez has sido irrespetuoso o rebelde con tus padres? – Dios dijo: ‘"Honra a tu padre y a tu madre” (Éxodo 20:9), y “cualquiera que maldiga a su padre o a su madre, de cierto morirá” (Levíticos 20:9).

La Biblia dice que “está decretado que los hombres mueran una sola vez, y después de esto, el juicio” (Hebreos 9:27). Si murieras hoy y Dios te juzgara en base a los 10 mandamientos, ¿serías hallado inocente o culpable? “¿O acaso no sabes que los injustos no heredarán el reino de Dios? No te dejes engañar: ni los inmorales, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los homosexuales, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los difamadores, ni los estafadores heredarán el reino de Dios” (1 Corintios 6:910) “…los cobardes, incrédulos, abominables, asesinos, inmorales, hechiceros, idólatras y todos los mentirosos tendrán su herencia en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda” (Apocalipsis 21:7-8)

El infierno es un lugar de “vergüenza y confusión perpetua” (Daniel 12:2) donde el diablo, los demonios, y los pecadores serán “atormentados con fuego y azufre… y el humo de su tormento asciende por los siglos de los siglos; y no tienen reposo, ni de día ni de noche” (Apocalipsis 14:9-10; Mateo 25:41; Apocalipsis 20:14-15). "Este será el lugar del que no conoció a Dios" (Job 18:21) “Porque el SEÑOR juzgará con fuego y con su espada a toda carne” (Isaías 66:14-16). “Los transgresores y los pecadores serán aplastados a una, y los que abandonan al SEÑOR perecerán... serán como árbol grueso cuya hoja está marchita, y como jardín en que no hay agua. El fuerte se convertirá en estopa, y su trabajo en chispa. Arderán ambos a una, y no habrá quien los apague” (Isaías 1:28-31).

6. ¿Alguna vez has matado a alguien? ¿Has sentido rabia u odio por alguien? – Éxodo 20:9 dice: "No matarás", pero Jesús dijo que cualquiera que esté encolerizado (o en rabia) contra su prójimo, es culpable de asesinato (Mateo 5:21-22) y la Biblia dice que “Cualquiera que odia a su prójimo es homicida” (1 Juan 3:15).

La Biblia dice que todos hemos pecado y por eso merecemos la muerte (Rom.s 6:23; Ez. 18:20). No tenemos derecho de estar cerca de Dios (Romanos 3:23) porque el pecado (las maldades que hemos hecho) nos ha separado de Dios (Isaías 59:2-4) porque Dios es Santo, puro y en Él no hay tinieblas ni sombra de maldad ni suciedad (1 Juan 1:5).

El infierno es descrito varias veces como un lugar donde el fuego no se apagará (Mateo 3:12; Isaías 34:9-10) y “el gusano de ellos nunca muere" (Marcos 9:43-49). Dios dijo al profeta Isaías que allí estarán los que hicieron lo malo ante Sus ojos y escogieron lo que no le complacía a Él (Isaías 65:11; Isaías 66:24).

4. ¿Haz guardado un día a la semana para descansar y aprender acerca de Dios? – En tiempos antiguos, Dios mandó a que se apartara un día a la semana para descansar y aprender acerca de Él (Éxodo 20:8). ¿Cuánto tiempo dedicas para aprender acerca de Él?

Dios te ofrece esperanza. . . Aunque merecemos el castigo de Dios, la Biblia dice que mientras tengamos vida tenemos esperanza de escapar de la condenación (Eclesiastés 9:4). Pero no sabemos si viviremos mañana (Lucas 12:13-21). Necesitamos de Dios. No podemos salvarnos nosotros mismos. Aunque hicieras muchas cosas buenas, tratando de compensar las cosas malas, seguirías siendo culpable ante Dios porque haz roto y transgredido Su ley. Si tu vida fuera una mesa y tú quisieras limpiar tu vida por medio de tus propias obras, sería como si trataras de limpiar una mesa con un trapo que está lleno de suciedad (Isaías 64:6). Sólo la ensuciarías más porque tu alma está sucia de pecado. Por esto, la Biblia afirma que no puedes salvarte por medio de tus propias obras (Efesios 2:9). Piensa en un criminal que está ante la corte para ser juzgado por sus crímenes. No importa cuántas cosas buenas haya hecho o cuántas cosas quiera hacer en el futuro: aun así tiene ser juzgado por los crímenes que ha cometido. La única manera de que no fuera a la cárcel sería por medio de una fianza y un reformatorio.

Dios quiere salvarte. . . Las buenas noticias para ti son que Dios no sólo es un Juez. Él también es un Padre amoroso y Él no desea condenar a nadie. En su juicio ningún criminal quedará impune, pero Él ofrece a TODOS una oportunidad de escapar del castigo de la condenación. Él dijo: “Vivo yo--declara el Señor DIOS, que no me complazco en la muerte del malvado, sino en que el impío se aparte de su camino y viva… (Ezequiel 33:11-12). “El Señor no se tarda en cumplir su promesa, según algunos entienden la tardanza, sino que es paciente para con vosotros, no queriendo que nadie perezca, sino que todos vengan al arrepentimiento” (2 Pedro 3:9). Él “quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al pleno conocimiento de la verdad. Porque hay un solo Dios, y también un solo mediador entre Dios y los hombres, Cristo Jesús hombre” (1 Timoteo 2:3-5).

¿Sabes quién es Jesucristo. . .? Desde hace siglos, en el Antiguo Testamento, en la Biblia, Dios avisó a muchos de los profetas de la antigüedad que vendría un Mesías, un Salvador que pagaría por los pecados de su pueblo y cargaría sobre sí mismo el castigo de ellos, para dar perdón, una nueva vida y libertad. El Nuevo Testamento explica un Pacto que Dios hizo con toda la humanidad y las muchas profecías que fueron cumplidas.

Empezando por los Evangelios, se narra cómo hace cerca de 2,000 años, Dios se envió a sí mismo como ser humano y vino al mundo en forma de hombre llamado Jesucristo (Juan 1:1-19), cuyo nombre significa ‘Dios está con nosotros’ (Mateo 1:23; 28:20). Conforme a las profecías de la antigüedad, Jesús fue concebido por el Espíritu Santo de Dios. Nació a una mujer virgen llamada María en una ciudad de Israel llamada Belén. Ella y su esposo José eran judíos que amaban a Dios. Cuando Jesús crecía, ellos habitaron en la ciudad de Nazaret, donde Él vivió una vida en pureza y perfección moral de pensamiento, palabra y hecho. Jesús enseñó los caminos y la voluntad de Dios. Él fue bautizado (sumergido) en agua Juan el Bautista y fue llenado del Espíritu Santo. Él predicó que es necesario vivir de manera justa ante Dios, arrepentirnos de nuestros pecados, y enseñó a Sus seguidores a imitarlo a Él y obedecer sus enseñanzas, las cuales fueron registradas en los cuatro evangelios del Nuevo Testamento, en la Biblia. Allí, Jesús mostró a Dios como un Padre Celestial que quiere que vivamos apartados del pecado de manera recta y santa. Jesús fue llamado Hijo de Dios (siendo similar a Dios) y al mismo tiempo, fue llamado Hijo de Hombre (siendo similar al hombre). Admitió ser el Mesías (Juan 4:26) e hizo muchos milagros y sanó muchas enfermedades, mostrando el poder y la compasión de Dios a la gente que le pide ayuda.

El mundo es duro. . . pero Dios te ama Jesucristo también fue perseguido e insultado por líderes religiosos y políticos. A sus 33 años, fue apresado por el imperio romano. Jesús fue azotado, ultrajado y humillado públicamente, y posteriormente, fue crucificado como el más vil de los criminales en una cruz, a pesar de que Él no había hecho ningún mal y era perfecto. Él no se negó a hacerlo porque desde el principio de los tiempos, “Cristo nos amó y se dio a sí mismo por nosotros, [como] ofrenda y sacrificio a Dios…” (Efesios 5:2). La Ley de Moisés establecía que “sin derramamiento de sangre no habría perdón” (Hebreos 9:22). Por ello, la purificación de la humanidad sólo podía lograrse por medio del derramamiento de la sangre (Levítico 6:7; 17:11). Jesús derramó su sangre, “habiendo ofrecido un solo sacrificio por los pecados para siempre” (Hebreos 10:12). Él dio su vida en una cruz; fue castigado por nuestros pecados, fue molido por nuestras iniquidades, y pagó el precio para hacernos libres de la enfermedad y darnos una libertad verdadera (Isaías 53). “Dios demuestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros” (Romanos 5:8)

Dios nos hace libres. . . Las últimas palabras de Jesús en la cruz fueron: 'Consumado es'; es decir, la deuda fue pagada. Imagina que estás frente a un juez y tú eres CULPABLE de un crimen muy serio. Toda la evidencia se presentó y no hay ninguna duda de tu culpabilidad. Ni tus disculpas ni tus buenas obras pueden borrar tus crímenes; y por consecuencia tienes que ser castigado. La multa que corresponde es de millones de pesos, pero no los tienes. El juez está a punto de sentenciarte, cuando alguien desconocido corre hacia el juez y te paga la multa. La corte acepta el pago y te declara libre de los cargos. Esto es exactamente lo que Jesucristo hizo por ti en la cruz. Jesús amó tanto a la humanidad, que Él pagó el castigo del pecado, para que nosotros no tuviéramos que pagarlo eternamente. Dios ha provisto una vía de escape, y eso es a través del mensaje de Jesucristo. “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en Él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna” (Juan 3:16).

Dios nos ofrece una vida nueva. . . Después de morir en la cruz, Jesús resucitó al tercer día. Él revivió por el poder del Espíritu Santo y enseñó a sus seguidores durante 40 días más. Luego ascendió al cielo, y desde entonces, Jesús está allí: Él está vivo ahora mismo, y Él es el mismo ayer, hoy y siempre (Hebreos 13:8). Él regresará pronto a la tierra, pero, “…aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para salvación de aquellos que ansiosamente le esperan” (Hebreos 9:28). La Biblia dice que, “…aunque antes Dios pasó por alto los tiempos de la ignorancia, en estos tiempos manda a todos los hombres, en todos los lugares, a que se arrepientan” (Hechos 17:30). Dios te ofrece más que una nueva oportunidad; te ofrece una vida nueva. Jesús dijo que es necesario nacer de nuevo para estar en el Reino de Dios (Juan 3:3). Si le pides a Dios, Él te dará un nuevo corazón (Ez. 36:26). Él dijo: "Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre sino por Mí” (Juan 14:6). También dijo: “Arrepiéntanse” (abandonen sus pecados) “y crean en el Evangelio (en el mensaje de Dios)”. La Biblia dice: "Arrepiéntanse y sean bautizados cada uno de ustedes en el nombre de Jesucristo para perdón de sus pecados, y recibirán el don del Espíritu Santo” (Hechos 2:38). “Acércate a Dios, y Dios se acercará a ti...” (Santiago 4:8). Si tu le sigues, “El estará contigo, no te dejará ni te desamparará“ (Dt. 31:8). “…Si le buscas, Él te dejará encontrarle; pero si le abandonas, Él te rechazará para siempre” (1 Crónicas 28:9).
FOLLETO - De la buena persona

Related documents

3 Pages • 2,509 Words • PDF • 267.3 KB

2 Pages • 354 Words • PDF • 399.6 KB

5 Pages • 735 Words • PDF • 2.6 MB

51 Pages • 22,263 Words • PDF • 683.8 KB

1 Pages • PDF • 1.4 MB

45 Pages • 16,216 Words • PDF • 1.8 MB

193 Pages • 110,424 Words • PDF • 77.5 MB

120 Pages • 37,127 Words • PDF • 960.6 KB

10 Pages • PDF • 3.2 MB

10 Pages • 2,814 Words • PDF • 493.1 KB

10 Pages • 2,815 Words • PDF • 1.5 MB